El Gobierno de EE.UU. impuso ayer sanciones a tres individuos y nueve entidades, procedentes de Rusia y Ucrania, por respaldar mediante “inversiones privadas y proyectos de privatización” la anexión rusa de la península de Crimea en marzo de 2014.
La portavoz del Departamento de Estado, Heather Nauert, informó de que los sancionados también fueron castigados por Washington debido a que están participando en “graves abusos contra los derechos humanos” en zonas de Ucrania con el fin de promover la “ocupación o el control” de Rusia. Esos abusos se están cometiendo supuestamente en la península Crimea y las autoproclamadas repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, en el este de Ucrania y que no están reconocidas por la comunidad internacional, aunque el Kremlin las apoya y respalda las elecciones generales de este domingo.