La incidencia del cólera sobre este país podría durar ocho o diez años más, según cálculo del doctor Bautista Rojas Gómez, ministro de Salud Pública, al que hay que reconocerle buen desempeño en el combate de esta enfermedad. Lo que resulta frustratorio es que la causa de esa persistencia obedece a la insuficiencia de agua de calidad a la población. El mismo ministro calcula en un  70% la cobertura en materia de suministro de agua potable entre los habitantes de este país.

 Desde que ensayamos por primera vez la democracia, los políticos aspirantes al poder han estado prometiendo remedio para todos los males. Ahora bien, el hecho de que a estas alturas se esté pronosticando que el cólera persistirá otros ocho o diez años, indica que por lo menos no ha sido cumplida la promesa de llevar agua potable a todos los rincones del país. El ministro de Salud Pública habla de una cobertura del 70 por ciento en un país que no debería tener ese problema.

Y aunque  la prevención del cólera no depende solamente de la calidad del agua, todavía tenemos grandes problemas de disposición adecuada de excretas, aguas residuales y otros desperdicios. Y es así como un pronóstico sobre la persistencia del cólera hay que conectarlo con lo que no han hecho, pero siguen ofreciendo, los políticos que han manejado el poder.

Autosuficiencia y excedentes

Durante los últimos siete años el país ha tenido excedentes de producción arrocera que le han permitido realizar exportaciones. Para este año, la  Comisión Nacional Arrocera ha calculado que las exportaciones de este cereal alcanzarán las 80,000 toneladas métricas. La autosuficiencia arrocera ha sido reconocida por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, país en el que hemos logrado colocar algunas partidas.

La autosuficiencia y tener excedentes exportables debería ser una meta para un país como el nuestro, con buenas condiciones climáticas, suficiente agua para riego y con posibilidades de lograr nichos en el mercado externo, sobre todo en países y regiones con las que tenemos tratados comerciales. Las políticas oficiales de producción y comercio deberían estar orientadas al logro de metas de autosuficiencia como la lograda en cuanto al arroz.