Aunque por lo general, cuando se piensa en miel de abeja, llega a la mente preparaciones dulces y remedios caseros, lo cierto es que sus propiedades van más allá, cuando de usos en la gastronomía se refiere.
Este fluido dulce, producido por las abejas, es un regalo de la naturaleza, y ofrece una gran variedad de opciones a la hora de utilizarla en la preparación de platillos, tanto dulces como salados.
Además de aportar un sabor exquisito, este endulzante natural otorga una textura melosa y espesa bastante agradable al paladar y a la vista.
Además, es ideal para preparar aderezos, salsas para carnes y pescados, así como para endulzar bebidas y por supuesto, postres.
Este “elixir” es un elemento esencial en una cocina sana e imaginativa, gracias a todos los beneficios que aporta a la salud.

Recetas
Salmón glaseado con miel y mostaza con aioli de perejil y cilantro

1 filete de salmón
Marinado
1 cucharadita de azúcar morena
1 cucharada de mantequilla
1 cucharada de aceite de oliva
1 cucharada de miel
1 cucharada de salsa de soya
1 cucharada de mostaza de Dijon
1 diente de ajo finamente cortado
Alioli

1/4 taza de mayonesa
1/4 taza de crema agria
2 cucharadas de cilantro fresco
1 cucharada de perejil fresco
1/4 cucharadita de sal
1 diente de ajo finamente cortado
Preparación. Corte el salmón. En un plato poco profundo, coloque los filetes de salmón con la piel hacia abajo. En un tazón, mezcle los ingredientes del marinado y viértalo sobre el salmón. Cubra, refrigere durante al menos 15 minutos, pero no más de una hora. Mientras tanto, en una licuadora, colocar los ingredientes del alioli. Tape y procese hasta que estén bien mezclados. Reserve o refrigere. Caliente el horno. Coloque una rejilla en una bandeja para asar poco profunda. Retire los filetes de salmón del marinado; reserve el marinado. Coloque el salmón con la piel hacia abajo en la bandeja. Hornee el salmón de 10 a 12 minutos, úntelo con una brocha o pincel con el marinado dos veces, hasta que las escamas del pescado se quiten fácilmente con un tenedor. Sirva los filetes del salmón con el alioli.

Pan de miel y pasas

3 tazas de harina
3 cucharadas de levadura
4 cucharadas de azúcar
4 cucharadas de aceite
1/2 taza de leche
1/2 taza de agua
4 cucharadas de miel
1/3 taza de uvas pasas
Una pizca de sal
1 huevo batido
Preparación. Caliente el horno a 350°F. En un recipiente profundo, mezcle todos los ingredientes hasta lograr una masa uniforme. Deje reposar por 15 minutos, para que la levadura haga efecto. Una vez haya crecido la masa, divídala en bolitas del tamaño de un puñado y dele forma de rosquillas. Acomode los panes sobre una bandeja para horno y déjelos reposar hasta que doblen su tamaño. Una vez hayan crecido, barnice la superficie de cada pan con el huevo batido. Hornéelos hasta que queden dorados (20 minutos aproximadamente).

Berenjenas fritas con miel

1 berenjena de buen tamaño
2 cucharadas de harina
Aceite de oliva virgen
Miel
Preparación. Cortar las berenjenas en bastoncitos, y ponerlos en un colador espolvoreando sal por encima durante media hora para que suelten todo el líquido posible. Secar muy bien con papel de cocina o con un paño limpio y pasarlos por harina especial para freír o harina de repostería. Llevarlos a una sartén o freidora con aceite caliente y freír hasta que doren. Sacar y escurrir sobre papel para que suelten el exceso de grasa. Servir y rociar con un poco de miel.

Tarta de queso y miel

1/2 taza de queso de untar
1 yogur natural
3 huevos
1/4 taza de azúcar
3 cucharadas de miel
1 chorro de licor
Preparación. Derretir la miel calentándola en el microondas hasta que esté bien líquida. Colocar en el vaso de la licuadora el yogur, la miel, el queso, y el azúcar. Batir bien hasta que se forme un líquido uniforme. Agregar los huevos junto al chorro de licor y volver a batir hasta que se integren. Untar el molde a utilizar con mantequilla para facilitar el desmolde. Rellenar el molde con la crema preparada. Hornear a 180º (horno precalentado previamente) hasta que al pincharlo con un palillo este salga limpio. Sacar del horno y dejar enfriar a temperatura ambiente y cuando esté templado reservar en la nevera al menos un par de horas para que asiente. Decorar con un poco de miel.