El 80 % de las empresas dominicanas son familiares, estas aportan alrededor del 75 % del Producto Interno Bruto (PIB) y tienen como su principal reto la sucesión, de manera que este sea un proceso que garantice la sostenibilidad de las compañías.
Así lo plantea un estudio de la firma consultora Exaudi, el cual indica además que solo un 30% de las empresas familiares pasa a una segunda generación, por lo que deben apoyarse en conocimientos y estrategias que la ayudarían a aumentar las posibilidades de combatir los obstáculos que están vinculados a ese reto.
Durante una entrevista para HOY, Lisa Morel, socia local; Guillermo Salazar, gerente y Pablo Aure Fariñez, director de Exaudi indicaron que el estudio hecho por esa firma indica que un 75% de las empresas familiares en República Dominicana están pasando por una etapa de relevo generacional.
Agregaron que muchas de ellas logran hacer adecuadamente esa transición, sin embargo, de acuerdo a estadísticas solo un 30 % sobrevive a la segunda generación.
Plantearon que para enfrentar el reto de la sucesión una empresa depende de varios factores, tomando en cuenta que la empresa familiar es un sistema muy complejo, conformado por la familia, la empresa y la propiedad, por tanto, hay que profesionalizar la gestión.
Destacan que es fundamental que las empresas estén asesoradas en sus procesos de sucesión, es decir, en la transferencia del legado familiar a los herederos de forma que el poder quede establecido de manera justa y la familia se sienta tranquila con esa sucesión.
A la hora de conformar el Consejo Familiar, que refleja de manera clara las responsabilidades de cada miembro de la familia para con la empresa y permite regular las relaciones de la familia con la empresa.
En la la conformación del órgano directivo de la empresa, encargado de establecer las políticas corporativas de gestión, seleccionar la alta dirección y tomar decisiones básicas sobre el rumbo de la empresa de acuerdo a prácticas profesionales.
También en la adopción de un Protocolo Familiar que permita dirimir los conflictos que puedan surgir de manera que se salvaguarde el proyecto empresarial de largo plazo para los miembros de la familia.