Comerciantes y comunitarios del sector Yagüita de Los Jardines del Norte, en el Distrito Nacional, denunciaron los abusos que contra ellos cometen agentes de la Policía Nacional, llevándole equipos de música, sobre todo bocinas, aunque estén apagados, y otras reprimendas contra jóvenes y mujeres.
En rueda de prensa, en la calle Primera del sector, los afectados señalaron que mientras los agentes bajo la dirección de un mayor que identifican como Peralta los mantiene en zozobra, a otros dos colmados propiedad de un agente de la Policía ni siquiera los miran.
Franklin Ramos, propiedad del colmado Frank, quien fungió como vocero de los afectados, atribuye la práctica a que no se dejan chantajear del oficial.
Observa como sospechoso que mientras los agentes al mando de Peralta no los dejan trabajar tranquilos, los colmados Merán, propiedad de uno de sus miembros, donde colocan música alta a cualquier hora del día o de la noche, no les incautan los equipos.
Entre los colmados asediados por el mayor Peralta figuran además del de Frank, El Rubio, Divina, La Morena, así como otros del sector, donde el oficial no quiere ver los equipos, sobre todo bocinas, pero tampoco personas sentadas frente a los establecimientos.
Lamentó la situación ya que además los despojos son practicados sin los levantamientos correspondientes y sin informaciones sobre su destino.
“Como nosotros no pagamos peaje, por eso somos objetos de extorsión policial en vez de protegernos”, expresó Ramos en compañía de Kelvin Pimentel, Johany Reyes, Noemí Hernández, entre otros colegas y comunitarios del lugar.
Informó que cansados de la represión se reunieron con el coronel de apellido Piña, jefe inmediato del mayor Peralta, pero que este los puso de ridículo alegando que no podía hacer nada para impedirlo.
Consideró que el mayor Peralta está peor que el del Caliche de Cristo Rey, ya que además golpea y dispara contra jóvenes que huyen de su persecución sin importar que las balas puedan agredir a personas inocentes en un sector donde las familias viven en total hacinamiento.
Además, dijo que el oficial vocifera palabras obscenas a las mujeres que reclaman respeto por sus hijos y vecinos, por lo que reclaman el traslado inmediato del oficial, antes que sea demasiado tarde y este cometa una tragedia en la comunidad.