El entorno del Ministerio de Interior y Policía se ve afectado por un notable cúmulo de basura y el incremento de vendedores ambulantes, que ofrecen diversas mercancías a la gran cantidad de extranjeros que acuden cada día a la sede del organismo a buscar su carné de regularización.
Pese a que los técnicos del ministerio hacen un gran esfuerzo para agilizar la entrada y entregar los carnés, los haitianos se quejan que el proceso es lento.
Sin embargo, es notable la gran cantidad que a diario va a buscar el documento, que ha aumentado luego que empezara el proceso de repatriación.
Inclusive las autoridades hicieron otra fila solo para embarazadas, envejecientes y mujeres con niños, la cual era bastante larga.
Rostros de cansancio, enojo y alegría se notaba en los haitianos, algunos por que habían amanecido para ser de los primeros en entrar al ministerio, otros porque sus carnés no estaban listos y a los que se los entregaban salían tan regocijados con una sonrisa, que no pasaban por desapercibidos.