Santiago. La Conferencia del Episcopado Dominicano ordenó en esta ciudad a monseñor Freddy Antonio de Jesús Bretón Martínez como obispo titular de la Arquidiócesis de Santiago, quien sucede en esa función al ahora obispo emérito monseñor Ramón Benito de la Rosa y Carpio.

La consagración episcopal de Bretón Martínez fue efectuada en una multitudinaria celebración eucarística desarrollada en el salón multiuso de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), encabezada por el nuncio apostólico de El Vaticano en el país, Jude Thaddeus Okolo, junto al cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, obispo metropolitano de Santo Domingo; y demás obispos, así como también monseñor Agripino Núñez Collado y el rector de la PUCMM, reverendo padre Alfredo de la Cruz Baldera.

El nuevo obispo de la Arquidiócesis de Santiago es oriundo de la comunidad de Canca La Reina, en el municipio de Licey al Medio, y en su vida religiosa ha ocupado diversos cargos pastorales, al tiempo de que ha dedicado parte de su tiempo a la escritura.

Luego de la consagración, Bretón Martínez dijo que “después de un largo tiempo el papa Francisco me pone a recorrer de nuevo estos caminos, así que en guagua, a pie o en lo que sea, debo realizar la honrosa tarea encomendada y es lo que ya había dicho, muchas oraciones me preceden y me acompañan. Vengo pues a cumplir esta misión confiando plenamente en el señor”.

“Valoro sobremanera la labor de los hombres y mujeres que en las distintas profesiones y quehaceres dan testimonio constante de verdadera fe y de entrega sacrificada ahora debo unir mi humilde aporte al de todos ellos y ellas y me complace hacerlo, por supuesto, no busca protagonismo, nunca lo he buscado, de hecho sólo me interesa ver a Cristo resplandecer en cada persona”, expresó.

En la eucarística estuvieron presentes importantes personalidades como la primera dama Cándida Montilla de Medina, el procurador de la República, Francisco Domínguez Brito; el alcalde Gilberto Serulle y los senadores Julio César Valentín, de Santiago; y José Rafael Vargas, de Espaillat; así como empresarios y dirigentes políticos locales y nacionales.