Juan María Ramírez 
Varias de las escaleras eléctricas y los elevadores de las estaciones de la línea Uno del Metro de Santo Domingo no funcionan, lo que dificulta el acceso a ese medio de transporte de ancianos, discapacitados y mujeres embarazadas y recién paridas. A esto se suma la falta de estacionamientos en lugares aledaños a las paradas, para que las personas que salen en sus vehículos puedan dejarlos y abordar el Metro.
Durante recorrido por todas las estaciones de esa línea del Metro se pudo comprobar que solamente en las paradas del Centro de Los Héroes, en el Distrito Nacional, y las Hermanas Mirabal, en Santo Domingo Norte, funcionan adecuadamente las escaleras y los elevadores. Por ejemplo, en la estación Francisco Alberto Caamaño, en la avenida Correa y Cidrón con Abraham Lincoln, la escalera eléctrica no funciona, pero tampoco los ascensores, a pesar de que por esa zona está el hospital infantil Robert Reid Cabral, la Escuela Nacional de Ciegos y otros centros de discapacitados. En la Amín Abel, frente a la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), tampoco las escaleras y los ascensores funcionan, pese a que es una de las paradas de mayor flujo de usuarios del Metro.
En el caso de la estación Joaquín Balaguer, una de las escaleras funciona, pero la otra está parada, en tanto que los ascensores no están en servicio. La estación Casandra Damirón, por donde entran y salen las embarazadas y paridas de la Maternidad La Altagracia, tampoco funciona el ascensor y solo una de dos escalera funciona, lo que dificulta el acceso al Metro de estas ciudadanas. Una situación similar presentan las escaleras en la estación Peña Batlle; las escaleras de la parada Pedro Livio Cedeño tampoco funcionan, tampoco los ascensores.
