Esto es lo que va ¿y punto?

Esto es lo que va ¿y punto?

Los dominicanos fueron obligados durante años y años a portar un documento de identidad y electoral vencido en su formalidad. En el exterior se registraron muchos casos de resistencia de autoridades a aceptar como vigente (por orden superior) una cédula cuyo texto impreso decía lo contrario. Una engorrosa contradicción con lo visible que difícilmente ocurriría a ciudadanos de otros países. Se trató de un retraso de cumplimiento en la actualización del documento que habla mal del Estado como un todo causado por una decisión unilateral. Debió existir voluntad y respaldo de recursos (en quienes correspondiera cada aspecto) para que todos los portadores de cédula pudieran actualizar identificaciones a tiempo, al vencer.

El proceso que actualiza los carnés está en marcha desde hace meses, pero de repente se ha dispuesto una caducidad del viejo documento cuando falta una parte importante de ciudadanos por ponerse al día, un trámite que consume horas y complica agendas; más a partir de ahora que muchos correrán a ponerse al día en brevísimo plazo. La decisión de anular un documento tan importante está siendo cuestionada por personas con autoridad y argumentos atendibles, partiendo de la realidad de que muchos ciudadanos deben incluir cambios fundamentales en sus datos personales, lo cual demanda más tiempo. Se les debería escuchar. Poner atención a sus reparos.

Sobre el mito de los liderazgos

Cuando se invoca la calidad de “primero entre iguales” y se dice representar a un sector difícil de controlar  como el de ciertos transportistas,  hay que ponerse a tono con la falta de sentido de orden que un número de choferes del “concho” y “voladoras” muestra  día a día por esas calles en las que hacen trizas las reglas de circulación. Quienes dicen dirigirlos gremialmente anunciaron una rebaja de los pasajes. De inmediato un sector de los  “obreros del volante” (?)  hizo caso omiso del mandato de las muy presumidas  cúpulas; esas que a todo sitio donde se toman decisiones acuden  con planteamientos de derechos, mas no de deberes, como si de verdad  dirigieran masas. Para los disidentes del “choferismo”, la rebaja de tarifa a los usuarios  será efectiva cuando a ellos les salga del “forro”… del cojín o del envase testicular, lo cual es absolutamente posible por la falta de autoridad.

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