Los principales obstáculos para la erradicación de la violencia de género en República Dominicana son el predominio de una cultura de dominación desde la cual se forma la masculinidad agresora,  y la desconexión entre los sistemas de salud y de justicia.

Otros son la falta de reconocimiento de las verdaderas causas del problema y la carencia de un sistema integral de atención para las víctimas de la violencia.

Las afirmaciones son parte de las conclusiones del estudio “Sobre vivencias: 4 casos sobre violencia contra la mujer y su relación con el sistema de protección en Santo Domingo”, que fue publicado ayer por el  Centro de Estudios de Género del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (Intec) y el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).

Los hallazgos establecen que a pesar del marco legal condenatorio de la violencia, la dinámica institucional para el abordaje del problema es “cultural y socialmente evasora de responsabilidad, encubridora de culpa y revictimizadora”.

La investigación, de tipo cualitativo, relata cuatro historias de vidas ligadas a la violencia, tres de mujeres abusadas por sus parejas y una de un hombre agresor sometido a la justicia. Los relatos, presentados en primera persona, reflejan el carácter permanente de la violencia en la vida de las mujeres y el rol de las familias y de su entorno en la continuación de ese círculo.

Concluye en que la mayoría de los programas de atención y sanción en las instituciones llamadas a proteger los derechos de las mujeres tratan a la violencia como un fenómeno episódico y no producto de factores permanentes.

También critica que el sistema  aborda el problema en “fragmentos manejables” y fraccionados, es decir que, mientras la justicia busca calificar un episodio para determinar la sanción del  agresor, la salud busca evaluar el cuadro clínico de una víctima para determinar su tratamiento, sin   vinculación entre ellos.

“Queremos llamar la atención a los prestadores de servicios para que entiendan la problemática”, expresó en la presentación Lourdes Contreras, coordinadora general del Centro de Estudios de Género de Intec.

De igual forma, los investigadores determinaron la falta de seguimiento que da el sistema a las denuncias, ya que, al revisar los archivos encontraron que la información de los expedientes no era  correcta o estaba desactualizada.

Penalización

Entre los hallazgos del estudio se destaca el hecho de que a una década de la aplicación de la Ley 24-97 Contra la Violencia Intrafamiliar quedó demostrado que ni la amenaza de penalización, ni la imposición de la pena misma se constituyen en un paso suficiente para la erradicación de la violencia. 

Las historias

El libro “Sobre vivencias”, presenta las historias de “Clara: una niña mutilada”; “Rosa; la soledad de un proceso revictimizante”; “Teresa: el tránsito de la desesperanza a través de las fronteras” y finalmente la del agresor “Jorge:…eres, entre todas las mujeres”.

La cifra

185 feminicidios en el 2008.  La cifra refleja un aumento de 16.35% con relación al 2007. Cada semana muere un promedio de 4 mujeres que son víctimas de la violencia.

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Ficha técnica

La investigación, que estuvo a cargo de Lucero Quiroga, Angel Pichardo Almonte, Desiree Del Rosario, Berenice Pacheco y Lourdes Contreras tardó dos años y sus objetos de  estudio fueron escogidos al azar entre las denuncias de violencia del Distrito Nacional y la provincia Santo Domingo.  Como parte del proceso, uno de los investigadores, destacó que una de las víctimas que iba a ser consultada se suicidó antes de iniciar las entrevistas y tras una vida completa de estar involucrada en relaciones de violencia.

Cifras de violencia preocupa al PNUD

La coordinadora residente en el país del Programa de las Naciones Unidas Para el Desarrollo (PNUD) manifestó ayer preocupación por los índices de violencia contra la mujer registrados en el país.

Valery Juliand dijo que de acuerdo con estadísticas,  en 2008 hubo un incremento de 16.35% con relación a los feminicidios del 2007.

Tras presentar credenciales ante el canciller Carlos Morales Troncoso, el pasado lunes, Juliand lamentó que apenas el 33% de las mujeres agredidas denuncian el maltrato por ante las autoridades.

Recordó que las Naciones Unidas han expresado preocupación por el flagelo mediante una serie de declaraciones y la redefinición de las políticas internacionales en relación con actos de violencia.

En ese sentido, explicó que a finales del año pasado, el secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon, presentó la campaña “Mujeres y Hombres unidos para la eliminación de la violencia contra la mujer”.