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KUWAIT. El delantero francés Nicolas Anelka llegó el lunes por la noche a Kuwait para una «visita religiosa» y se negó a responder a los periodistas si finalmente jugará o no en el Atlético Mineiro, tal como se anunció en Brasil.
«Estoy en visita religiosa a Kuwait y no voy a hablar de fútbol», declaró el polémico jugador, invitado por el ministerio de Asuntos Religiosos de Kuwait para un encuentro con jóvenes musulmanes. El futbolista francés, convertido al Islam, ha acusado con frecuencia a la prensa occidental de dar una «imagen deformada» de esta religión. Se desconoce si Anelka continuaba en el país asiático o no este martes.
El presidente del Atlético Mineiro, Alexandre Kalil, anunció hace diez días en su cuenta de Twitter la contratación de Anelka, pero desde entonces el jugador no apareció por Brasil, aumentando el misterio sobre la contratación o no del delantero. El pasado jueves, el director de comunicación del Atlético Mineiro, Domênico Bherin Almeida, declaró a la AFP que quedaban detalles por solucionar del contrato del jugador para que Anelka firmase con el club brasileño.
