Tania Hidalgo 
Luego de intensos debates y pese al rechazo del Partido Revolucionario Moderno (PRM) y del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) impuso su mayoría en la Cámara de Diputados y aprobó, tras declarar de urgencia, en dos sesiones consecutivas, el proyecto de ley que sustituye por valores de deuda pública el financiamiento por 600 millones de dólares entre el Estado y el Banco Nacional de Desenvolvimiento Económico y Social (Bndes) para la construcción de la central termoeléctrica de Punta Catalina, en Baní, Peravia.
El presidente de la comisión de Hacienda, Ramón Cabrera, defendió el proyecto y pidió a sus colegas votar a favor.
Dijo que la obra está avanzada en más de un 60 por ciento y que su terminación sería en 2018.
“Es importante que sepan que con Punta Catalina, el Estado se ahorraría unos 400 millones de dólares anuales, lo que vendría a bajar el déficit fiscal”, precisó Cabrera al rendir un informe favorable.
De igual manera, dijo que cumple con todos los lineamientos medioambientales, los cuales fueron aprobados por el Banco Mundial. “Esta inversión tendrá un retorno de cinco años”, enfatizó el legislador del partido oficialista.
En primera lectura, el proyecto logró 118 votos a favor y uno en contra. En tanto, en segunda apoyaron 117 y uno en contra. En ambos casos el voto negativo fue del diputado Santos Ramírez. Los bloques reformista y perremeista se abstuvieron.
Debates. Durante los debates presentaron sendos informes disidentes los diputados del PRM Faride Raful y Francisco Javier Paulino, miembros de la comisión de Hacienda.
En forma enérgica, la congresista por el Distrito Nacional cuestionó diversos aspectos del proyecto y dijo que su misión allí es velar por el funcionamiento correcto de las labores legislativas y no solo limitarse a cobrar un salario, lo que generó reacción de sus colegas de la bancada del PLD. “Al analizar el proyecto remitido por el Poder Ejecutivo nos surgieron cuestionamientos que afectan la transparencia en la que podrían ser ejecutados los US$600MM. Tanto el ministerio de Hacienda como el vicepresidente de la CDEEE no entregaron datos contundentes que satisficieran nuestras inquietudes. El monto a pagar por comisiones en ocasión de la colocación de estos bonos en el mercado internacional, el estudio de factibilidad financiera que detalle cómo se iría a realizar el repago de esa deuda, así como el costo final de esta central termoeléctrica constituyen datos fundamentales para edificar y construir una posible aprobación del proyecto”, precisó Raful.
Pidió que el documento fuera devuelto a la comisión o enviado a una especial para que se haga una exhaustiva investigación acerca del monto ya invertido y una proyección real de lo que le costará al país su construcción y puesta en ejecución. En ese mismo sentido se pronunció, Javier Paulino, quien precisó que no se le informó el valor de los terrenos, ni la forma de adquisición. Pedro Botello, del PRSC, también se pronunció en contra.
Cancelar contrato. En tanto, Fidelio Despradel propuso la cancelación del contrato con la empresa Odebrecht por incumplir con sus compromisos de financiamiento de la obra.
