“Honorables magistrados” corruptos

“Honorables magistrados” corruptos

El Consejo del Poder Judicial y la Procuraduría General de la República han dado un paso gigantesco hacia el saneamiento del sistema de Justicia, tras el anuncio del arresto y sometimiento a juicio de cinco jueces acusados de emitir sentencias para favorecer delincuentes a cambio de dinero.
Primera vez en la historia dominicana que ocurre algo semejante. Cinco magistrados escrupulosamente investigados, arrestados y sometidos a juicio, por ser copartícipes, según las autoridades del Ministerio Público, de un entramado societario corrupto, que liberaba a personas ligadas al crimen organizado.
Guardan prisión domiciliaria, Awilda Beltré y el ex consejero Francisco Arias Valera; se ha anunciado el enjuiciamiento de los “honorables magistrados” José Dionisio Duvergé Mejía, Rosó Vallejo Espinosa y Víctor Mejía Lebrón, acusados de prevaricación y violaciones graves del Código Penal, corrupción vestida de toga y birrete.
Antes se rumoreaba, era vox populis, que “honorables magistrados”, fiscales y alguaciles aceptan grandes sumas de dinero de familiares y abogados defensores para liberar acusados de delitos graves, pero nunca se había logrado documentar, mediante una investigación profunda, la veracidad de tales sospechas. Se ha divulgado que otros servidores del poder judicial y abogados están bajo la mira de los investigadores, relacionados a la trama de corrupción más importante del sistema judicial jamás descubierta.
Ahora el Presidente de la Suprema Corte de Justicia, doctor Mariano Germán, en su calidad de titular del Consejo del Poder Judicial, dispuso las indagatorias urgido por iniciativas provenientes del Procurador General, Domínguez Brito. Y la toga ha sido rota por el lado más grueso: los jueces.
Ambos merecen el reconocimiento público, pues erradicar mafias que impunemente permean la Judicatura Dominicana deviene en tarea responsable, ardua e impostergable.
Pero, honorables magistrados, ¿llegarán hasta las últimas consecuencias? ¿Se dictarán sentencias ejemplares? ¿Hasta dónde llegó ese vandalismo ilustrado?
Una Justicia de jueces venales jamás funcionará.

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