Con la explotación  de Loma Miranda lo que se pone en   peligro es la producción de agua, pues de allí depende la generación de lluvias, irrigación de 122,000 tareas arroceras,  abastecimiento humano para    400,000 personas además de la preservación de especies de fauna y flora exclusivas.

Estos y otros argumentos fueron reiterados por técnicos de  la Academia de Ciencias de la República Dominicana quienes  apuntaron que conceder  el permiso para explotar ferroníquel en Loma Miranda, como pretende la empresa Falcondo,  equivale a dar entrada a las mineras   hacia la Cordillera Central.

Durante el Almuerzo  del  Grupo de Comunicaciones  Corripio  debatieron el tema Milcíades Mejía, presidente de la Academia de Ciencias; Luis Scheker Ortiz, vicepresidente; Eleuterio Martínez, Adolfo López,  de la Comisión de Ciencias Naturales y Medio Ambiente; Felicita Heredia, Luis Carvajal, del Equipo Ambiental junto a Félix Díaz, de  la  Cooperativa Vega Real y Juan Frías Agramonte.

Institucional.   Mejía apuntó que con ese proyecto   se ha  expuesto nueva vez el dilema “si agua o minería”, tras informar que numerosas entidades pidieron asistencia técnica a la Academia de Ciencias. Explicó que se trata de una loma que garantiza la estabilidad ambiental del país y de forma específica la región  del Cibao Central. Recordó que existe un anteproyecto de ley para  declararla   como   área protegida.

Deploró que mientras las Naciones Unidas ha  llamado a los gobiernos del mundo  a tener una preocupación por la  conservación del agua, ya que el 85% está destinada para la producción agrícola, el país  hace   lo contrario cuando debe ser su prioridad.

Mientras Scheker  indicó que el Estado tiene la responsabilidad insoslayable en darle cumplimiento al mandato constitucional, que  establece  la  protección del medio ambiente y los recursos naturales y del restablecimiento del daño que resulte de cualquier operación minera.

Riqueza natural.  Martínez explicó que Loma Miranda, aunque es pequeña con relación a otras formaciones de la Cordillera Central,  contiene valores que no  hay en ninguna otra  parte del país y que constituye  una especie de pared que hace oposición a los vientos que arrastran la humedad del Océano Atlántico, de donde proceden todas las lluvias que caen en la isla de Santo Domingo.

Destacó que está  estratégicamente  ubicada en el mismo centro de la cuenca hidrográfica más importante de la isla, que es la Yuna-Camú de unos 5,300 kilómetros cuadrados y,   que atrapa mayor humedad en todo el territorio.

Detalló que cuando los vientos cargados de humedad vienen del océano, Loma Miranda provoca la elevación de las nubes, luego  su condensación  y posterior   formación de lluvias.

Destacó a partir de ahí se  conforma todo un sistema hidrológico con una enorme cantidad  de arroyuelos, ríos y cañadas y justo en el centro de todo esto está el  proyecto de extracción de ferroníquel.

Martínez dijo que para hacer minera ahí, hay que pelar, descapotar y  remover vegetación natural, tal como ha hecho Falcondo en las lomas Peguera y Ortega, donde  también extrae níquel. Cuando esto se remueve, dijo, no hay forma de reponer.

Explicó que cuando se desmonta  la trampa natural que retiene la humedad  la roca se reseca con el sol y el viento y además se inicia un movimiento del agua subterránea hacia arriba

Señaló además que  Loma Miranda tienen una alta biodiversidad y concentra  98 de las 201 familias especies de vegetales que existen en la isla.

Citó que entre los animales hay reptiles, anfibios y aves que tiene una distribución muy localizada.

Daños a la salud.  En cuanto a la contaminación por metales pesados, específicamente el  cromo, Martínez reiteró que en  Loma Miranda  el níquel  está asociado al hierro, al aluminio y al cromo. Estos dos últimos  son metales pesados que no se pueden mover cuando penetran al cuerpo humano y que serían liberados al aire  una vez haya remoción de las rocas que lo contienen.

Afirmó  que el cromo es cancerígeno, puede producir mal formación  congénita y  afectar un embrión y provocar un aborto.

Indicó que la propia minera ha admitido  que  hay cromo en Miranda, tras apuntar  que el principio precautorio de la ley ambiental ordena evitar cualquier actividad que pueda poner en riesgo la vida humana.

En tanto Mejía dijo que   la explotación   arrastraría aguas abajo grandes  cantidades de sedimentos que afectarían los cauces de los ríos y arroyos.

Heredia apuntó que en la presa Rincón puede ocurrir el mismo patrón de contaminación de la presa de Hatillo que producto de la explotación minera a cielo abierto, hoy en día no existe producción de peces y el subsuelo está contaminando con metales pesados.

Recordó que allí se implementaron varios proyectos pesqueros y camaroneros con ayuda extranjera, los cuales se perdieron.

 Producción agrícola.   Díaz destacó que el  arroz es  un renglón básico del consumo nacional y que en los valles de Bonao y La Vega se producen más  del 20% del total del país.

Afirmó que en la proyección de explotación de 20 años que pretende Falcondo se producirían US$1,196 millones en arroz, mientras  por la venta del níquel solo se generarían utilidades brutas al Gobierno por  US$585.

Dijo  además del  arroz se producen  vegetales chinos, aves, carnes de cerdo  y res, actividades que  generan más  10,000 empleos.

Es por tanto  cree que la concesión de explotación de la loma afectaría     la producción de alimentos y la seguridad alimentaria.

Expansión.  Mientras  Luis Carvajal refirió que Falcondo  ha dicho que va a explotar la tercera parte del área, unas 331 de las 450 hectáreas de la concesión, lo que se haría en menos de seis años y no en 22 como ellos han planteado.

 Rechazó que la minera  tenga su  plan de cierre , sino que  dejarán al país un grave problema y una deuda ambiental impagable, por lo que beneficios para el país no son tales.

Citó que el hecho que ellos plantean que van a  convertir parte de la zona en una área protegida, están admitiendo que  necesita protección.   “Allí hay valores que solo uno de ellos justificaría la  protección”, dijo.

En tanto López indicó que  explotar Loma Miranda equivale a dar el primer picazo en la Cordillera Central que quiere realizar las mineras en la región  “Madre de la Aguas”. “Allí lo que se produce es  agua y el agua vale mucho más que el ferroníquel, el oro y que cualquier otra cosa”, dijo  López.

Ambos técnicos criticaron que Falcondo ni siquiera ha reparado los daños  ambientales en las lomas Peguera y Ortega que ha explotado en los últimos 40 años.

La cifra

1,196

Millones de dólares. Generaría  la  producción   de arroz, mientras  por el níquel se generarían utilidades brutas al Gobierno por  US$585. Los técnicos  alegan que aunque los  beneficios para el Estado   puedan parecer  atractivos, el país heredará un grave problema y una deuda ambiental impagable.

Las frases

Milciades Mejía

Existe una necesidad de conservar esa loma para  garantizar la estabilidad ambiental y productiva de esos pueblos”.

Luis Scheker Ortiz

No hay ninguna posibilidad que si se lleva a cabo la explotación que persigue esa minera no haya un daño inevitable e irreversible, de ahí la preocupación”.

Eleuterio Martínez

Loma Miranda es una esponja natural que le sustrae directamente la humedad a las nubes y luego la pasa al subsuelo para llenar la capa freática”.

Adolfo López

No estamos dispuestos a admitir que entren  en la Cordillera Central en la forma salvaje  que se pretende… allí lo que se produce es agua”.