Santiago
José Ángel Vargas, de 7 años, es uno entre los cientos de niños que acuden por internamiento al hospital Infantil, Doctor Arturo Grullón para ser sometidos a una operación, pero en cada visita que sus padres realizan al centro de salud deben marcharse con la desagradable realidad de que su hijo no podrá ser atendido por falta de equipos médicos.
“Mi niño tiene un quiste en la garganta desde hace tiempo y me tienen dando vuelta de aquí para allá y de allá para acá”, narró angustiado Gustavo Vargas, padre del menor residente en el municipio de Navarrete.
Dijo que su vástago ya no puede asistir a la escuela debido a que el crecimiento de la verruga en la garganta le molesta.
Y es que a pesar de que todos los meses el centro de salud recibe aproximadamente más de 900 pacientes, desde el año 2002 no cuenta con un tomógrafo para someter a los niños a estudios y determinar cierto tipo de padecimientos, lo que dificulta el servicio a los más pobres que se trasladan desde las 14 provincias del Cibao.
Solo funcionan dos quirófanos, de los siete que había en la institución en el 2015.
Por esa razón, el pastor Pablo Ureña permaneció encadenado durante cinco días en el frente del hospital, reclamándole al Ministerio de Salud Pública que invierta lo necesario para mejorar las condiciones de este centro.
Ayer el religioso regresó al centro después de haber sido ingresado en una clínica privada por problemas de salud y agotamiento.
Esta vez no se encadenó, sin embargo, dijo que como una forma de protesta se dejará crecer la barba hasta que las autoridades escuchen sus reclamos.
Ureña ha denunciado que en el hospital solo se realizan operaciones en los casos de emergencia.
La dirección del hospital confirmó a este medio la denuncia del pastor, de la falta de un tomógrafo y de varios quirófanos para someter a estudios y operaciones a los niños que acuden al centro de salud.
“Hemos hecho la solicitud de estos equipos al Ministerio de Salud, pero todavía estamos esperando respuesta”, dijo la doctora Rosa María Morel, a través del Departamento de Relaciones Públicas.
Pese a la carencia de los equipos, el hospital asegura que no ha fallecido un menor por esa causa.