Familiares de Rubén Darío Hipólite Martínez, asesinado por miembros de la Policía Nacional el pasado viernes en el Residencial Renata III, del distrito municipal Pantoja, del municipio Los Alcarrizos, aseguraron ayer que los agentes irrumpieron de manera violenta en la vivienda, sacaron a la víctima a golpes del baño, donde estaba escondido junto a varios niños, lo sentaron en una silla y le dispararon en una pierna en presencia de los menores.
Aseguraron que no conformes con eso, los policías lo tiraron al piso de la sala y le dispararon varias veces por la espalda, y luego arrastraron su cadáver hasta una camioneta donde también subieron a los niños.
Parte de la escena en la habitación donde estaba escondido Martínez quedó grabada en una transmisión en vivo que este hizo a través de las redes sociales. En ese momento le pedía a los policías que no le hicieran daño porque habían niños y estaba esperando que la madre llegara para entregarse, pero los agentes ignoraron el pedido y rompieron la puerta.
“No fue un animal que mataron, mi hermano dejó una niña huérfana y hoy no está con nosotros porque la Policía lo ejecutó sin darle la oportunidad de entregarse como él pretendía hacerlo, y por eso nosotros exigimos que se investigue y se llegue hasta las últimas consecuencias”, dijo Ángela Mateo Martínez, su hermana.
Hipólite Martínez era buscado por supuestamente herir en el tórax al capitán de navío de la Armada de República Dominicana, Augusto Alberto Lizardo González y a su hijo de 5 años, en un hecho ocurrido en mayo de este año.
Luego del suceso la Policía Nacional difundió una nota de prensa en la cual atribuía la muerte del sospechoso a un “intercambio de disparos”, versión que fue desmentida por el vídeo que circula en las redes sociales, y`por familiares de la víctima y vecinos.
Sobre el asesinato la familia afirmó que los agentes del orden penetraron de manera violenta en la vivienda y luego, en la habitación donde se encontraba la víctima en compañía de varios niños, sin una orden judicial y sin la presencia de un fiscal, lo que les hace pensar que la muerte de su pariente se trató de una ejecución.

Asimismo, Mateo Martínez narró cómo uno de los menores que se encontraba en el lugar le contó el miedo que sintió cuando escuchó a su tío pedir a los agentes que no le hicieran daño, que se iba a entregar en cuanto llegara la madre de los niños a buscarlos.
“Él me dijo que se asustó cuando la Policía rompió la puerta de manera violenta y sacó a su tío a golpes mientras intentaba protegerlos, siendo un niño ya tuvo que presenciar cómo le disparaban a su tío que pedía clemencia a las autoridades”, narró sobresaltada la hermana.
Aseguró que están dispuestos a ir hasta las últimas consecuencias para investigar las razones que llevó a la Policía a violentar todo proceso para matar a su pariente, ignorando que en el lugar habían niños.
Derechos Humanos. En tanto que el presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, Manuel María Mercedes, deploró que en el país no existan garantías de derechos.
Lamentó que en la República Dominicana se violen los derechos humanos de manera flagrante, viendo a un ciudadano clamando justicia y en presencia de niños haya sido ejecutado.
“Esto constituye una muestra de que el país en materia ejecuciones extrajudiciales, en materia de maltrato, torturas y apresamientos ilegales está en una situación vergonzosa”, puntualizó Mercedes.
Asimismo, reveló que en los últimos meses se han producido más de 10 casos de violaciones de derechos humanos que no han tenido sanciones.
Mercedes demandó al director de la Policía Nacional, Ney Aldrin Bautista Almonte, realizar acciones urgentes para detener esa práctica ilegal que violenta la Constitución, y los convenios internacionales.
“No es creando comisiones que al final no investigan nada que se va resolver el problema, porque esas comisiones no llegan al fondo de las investigaciones”, subrayó.
Dijo que la Policía Nacional no debe ser juez y parte, por lo cual considera inaceptable que la comisión sea formada por miembros de la misma institución. A lo que atribuye que más del 90% de los casos queden sin sanciones.
“Aquí la Policía se investiga a sí misma, el Ministerio Público se investiga a sí mismo, igual ocurre con los jueces, por eso no hay garantías de imparcialidad que puedan dar con la verdad de los hechos que están ocurriendo”, expresó.
Agregó que esos actos no deben quedar sin sanciones, por lo cual la Comisión de Derechos Humanos estará pendiente del proceso que se lleve durante las investigaciones.

EL ESPECIALISTA
VICENTE VARGAS
Psiquiatra

Repercusión niños
Las repercusiones que pueden tener en los niños el ser sometidos a ese nivel de violencia pueden ser traumáticas, señaló Vicente Vargas al destacar que, esos pequeños que presenciaron ese acto de “barbarie” deben ser evaluados por psicólogos y psiquiatras infantiles para luego ser tratados de manera constante , ya que en los primeros 30 días aparecen reacciones de estrés traumático, pero después de pasado ese tiempo aparecen las reacciones del estrés postraumático, el cual puede tener repercusiones devastadoras en la persona.

ZOOM

La PN
El vocero de la Policía Nacional, Frank Félix Durán Mejía, dijo ayer que por el hecho fueron suspendidos cuatro agentes para fines de investigación.
Informó además que para profundizar en la investigación de los hechos el director de la Policía Nacional, Ney Aldrín Bautista Almonte, designó una comisión encabezada por el director de Asuntos Internos, Héctor García Cuevas, el inspector general de la Policía, Atahualpa Cabrera Sarita y se solicitó un miembro del Ministerio Público, el cual aún no ha sido designado.
“Estamos procurando que esta investigación sea lo más transparente posible para dar los resultados”, señaló Durán Mejía.