Puerto Plata
Familiares de los 127 dominicanos apresados en Las Bahamas por pesca ilegal tienen la esperanza de que las autoridades dominicanas lleguen a algún acuerdo que permita la liberación de sus parientes, ya que ellos no tienen recursos para pagar las exorbitantes multas que les fueron impuestas.
De lo contrario temen que pasarán muchas calamidades, porque su sustento depende del trabajo que realizan esos pescadores en alta mar.
Sesenta mujeres, cónyuges y familiares de igual cantidad de pescadores, formaron un comité de lucha para lograr que el Gobierno por gestiones diplomáticas y consulares, “nos devuelva sanos y salvos a quienes por medio de la pesca licita surcan los mares del Atlántico para darnos de comer junto a nuestros hijos”.
Como voceras del grupo hablaron Enerolisa Carrasco, Julisa Miranda, Ramona Disla, Ada Sánchez, Judiri Cruz Almonte y Gladys Domínguez, quienes dijeron estar satisfechas de las gestiones de la Asociación de Dueños de Barcos Pesqueros de Puerto Plata, y del Gobierno a través de la Cancillería.
Carrasco, hermana de los pescadores José Davis y Rafael, dijo que esta situación “nos provoca desesperación porque no sabemos cuándo libertarán a nuestros parientes, los cuales nos sustentan con lo que ganan en los barcos pesqueros”.
Miranda, esposa de Ángelo Agustín Estévez, con quien procreó una niña de seis años, espera que se encuentre bien ya que se ha corrido la voz que muchos están enfermos y pasando grandes calamidades.
Disla aseguró que ha conversado en varias ocasiones con su hijo Juan de Jesús Paulino, quien es padre de cuatro hijos menores de 12 años, que dependen de su sustento.
Sánchez, Cruz Almonte, Nazario y Domínguez esperan que sus familiares retornen pronto, pero además consideran que el Gobierno dominicano debería investigar por qué la Guardia Costanera de Cuba optó por entregar a este grupo de dominicanos a los ingleses, cuando todo indica que estos fueron apresados en aguas cubanas.