En la Base Aérea de San Isidro, de la Fuerza Aérea de República Dominicana (FARD), no solo se les ha dado vivienda a alistados y paramilitares, sino que la institución militar también ha tenido la intención de alivianar la carga de la canasta básica de las más de mil familias que allí residen, actividad que realiza a través de dos proyectos: uno agrícola, el cual alberga tres invernaderos, y el otro avícola, que acoge dos naves de producción.
Al adentrase hacia los terrenos que acoge la población militar y situarse hacia la parte sureste de la institución, los olores que destilan los ajíes Morrón y Cubanela dan la bienvenida a una producción de vegetales que aunque está en su etapa inicial ya ha dado sus frutos. En 2,500 metros que abarcan los tres invernaderos, en dos de ellos, las plantas de ajíes enverdecen el entorno y sus retoños acaparan la vista de cualquiera. El tercer invernadero está dedicado a la producción de tomates híbridos. De las 2,150 plantas de ajíes que hay sembradas, 850 del tipo Cubanela y 1,300 de Morrón, ya se han tomado cinco cosechas, producción que se ha vendido a bajos precios a los militares. En las cosechas ya se han sacado más de 70 quintales de tomate, y unos 45 quintales de ajíes, según Félix González, encargado del proyecto agrícola.
De cada planta de tomates sembrada allí se pueden obtener sin dificultad 30 libras de estos, según González, quien explicó que en los terrenos colindantes a los invernaderos ya hay sembradas berenjenas y guandules, además de que después se cultivarán pepinos, molondrones y plátanos, con el fin de incrementar el proyecto. En lo referente a avicultura, la FARD tiene una población de 11 mil pollos, de la que se venden unas 45 mil libras de carne a los militares.