BARCELONA. La Federación Española de Fútbol se enfrascó el miércoles en un conflicto abierto con el funcionario del gobierno español a cargo del deporte. Tras una reunión en Madrid, la Federación informó que enviará una solicitud por escrito a la UEFA, a fin de que Miguel Cardenal, secretario de Estado para el Deporte, sea destituido como miembro del Consejo Internacional de Arbitraje Deportivo (ICAS).
La Federación pedirá que se despida a Cardenal de “cuantos cargos haya podido asumir en comisiones o áreas de trabajo, e insistiendo en que le sea retirado el apoyo de la propia UEFA para ser miembro del ICAS”.
Además de criticar el desempeño de Cardenal en el organismo rector del fútbol europeo la Federación advirtió que escribirá a la FIFA, para expresar la “queja más severa por la intromisión ilegítima del Consejo Superior de Deportes en materias reservadas al fútbol español”.
La Federación dijo que su decisión constituye una respuesta al “intervencionismo desmesurado” del Consejo Superior de Deportes en asuntos del fútbol.
El Consejo respondió que el comunicado de la Federación contenía “falsas acusaciones”. Angel María Villar, presidente de la Federación, ha tenido discrepancias crecientes con Cardenal sobre los subsidios del Estado para el fútbol y las medidas para combatir la violencia de los hinchas.
El comunicado de la Federación mencionó que la “supresión de subvenciones” constituye una de las razones de la petición formulada ante la UEFA. El Consejo respondió señalando que la Federación ha evitado las auditorías externas sobre sus finanzas y ha suspendido las comunicaciones con Cardenal. En un comunicado reproducido por la agencia Europa Press, el Consejo invita a que la Federación colabore con los auditores externos, para que completen su tarea sobre el año fiscal 2013.
“No confundan con artificiales enfrentamientos los retos que institucional y personalmente les pueda estar planteando el cumplimiento de las normas sobre justificación de subvenciones, transparencia y auditoría”, indica el comunicado.
El presidente de la liga española, Javier Tebas, defendió a Cardenal y al Consejo. Dijo a medios españoles que este organismo tiene el derecho y el deber de exigir más transparencia a la federación.