El 75% de los emprendimientos de Fintech o la tecnología aplicada a mejorar los servicios financieros, de República Dominicana se encuentra enfocado en soluciones al mercado de consumidores y a las pequeñas y medianas empresas que están excluidas o subatendidas por el sistema financiero tradicional, de acuerdo a un estudio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la entidad Finnovista.
El estudio muestra que esta exclusión ha hecho que las Fintech ofrezcan soluciones orientadas a mejorar los niveles de inclusión financiera.
En América Latina las cifras son similares en Bolivia, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Panamá y Paraguay, el 100% de estas fintech va dirigido a estos mercados. En Venezuela 60%; México 52% y Guatemala 50%.
De acuerdo al estudio “Fintech: Innovaciones que no sabías que eran de América Latina y el Caribe”, estos altos porcentajes en este tipo de fintech se debe a que la mayoría de los países de la región tiene altas tasas de exclusión financiera.
Según datos de la Encuesta Findex (Banco Mundial, 2017), en 2017 tan solo el 54% de la población adulta de la región tenía acceso a una cuenta bancaria; solo el 12% de la población declaró haber ahorrado en una institución financiera formal, solo el 9% declaró haber tomado un préstamo de una institución financiera, mientras que se estima que el 61% de la población en la región todavía paga sus facturas en efectivo.
“Sin embargo, este contexto de elevada exclusión (y autoexclusión) del sistema formal financiero coexiste ahora con una fuerte presencia de desarrollo tecnológico en la región, concretamente de penetración móvil y extensión de servicios de banda ancha y otros productos y servicios”, destaca el BID.
En 2017 la penetración de Internet móvil en América Latina y el Caribe alcanzó el 50%, una cifra por encima de la media mundial, que se sitúa en el 43%, y se espera que en 2025 alcance el 66%.
El estudio explica que la combinación de altas tasas de exclusión financiera y una elevada penetración móvil e innovación tecnológica suponen una gran oportunidad para el sector Fintech dada su capacidad de hacer llegar los servicios financieros a través de la tecnología a una parte de la población que hasta ahora no se ha visto adecuadamente atendida por los servicios financieros tradicionales.
Acceso a crédito. El BID explica que las Fintech ofrecen un abanico más amplio de productos destinados a mejorar el acceso a distintos productos financieros, sobre todo para las Pyme. Un ejemplo de ello es el acceso a nuevos modelos para la obtención de crédito o capital, que crean un nuevo escenario de financiamiento empresarial. Actualmente la obtención de un crédito resulta casi imposible para muchas de las pyme por la incapacidad.
“Sin embargo, las compañías Fintech han desarrollado sistemas de puntaje alternativo a través del desarrollo de algoritmos que permiten analizar el riesgo crediticio de manera innovadora y así tomar decisiones sobre la solvencia de un cliente, lo que a su vez amplía el acceso de las Pyme a créditos bancarios incluso teniendo poco o ningún historial crediticio”, expresa.
En otro orden, el estudio también destaca que para el 55,6% de las empresas Fintech de la región el principal reto que enfrentan es escalar, mientras que para un tercio (33%) es acceder a fondos.
Fintech para remesas
Muchas son las posibilidades que ofrecen las Fintech en la mejora de los servicios financieros, tales como los pagos o transferencias a través de dispositivos móviles. Según GSMA, las remesas enviadas a través de dispositivos móviles suponen ya el producto que ha experimentado un mayor crecimiento en términos de volumen transaccional (+52%) por segundo año consecutivo en América Latina.