La Fuerza Nacional Progresista (FNP) y el Polo Soberano reafirmaron ayer los compromisos con una política activa de empleos como el mejor instrumento de lucha contra la pobreza.
Al efecto, sus candidatos se comprometieron a aplicar las normas de Nacionalización del Trabajo, muy especialmente las reglas del 80/20, previstas por la Constitución, el Código de Trabajo y la Ley de Migración.
Destacan que el Estado y las municipalidades deben ser los primeros en cumplirlas en la construcción de sus obras públicas.
Explicaron que esta medida está llamada a permitir el acceso de los dominicanos pobres, con poca calificación laboral, a más de 250 mil puestos de trabajo que en la actualidad se encuentran en manos de trabajadores extranjeros en condiciones de ilegalidad.
Esta medida, a ejecutarse en forma progresiva, mejorará el salario real y las condiciones laborales, en especial en la industria de la construcción y la agricultura.
Propusieron la apertura en todo el país de oficinas de intermediación y orientación laboral, en un esfuerzo coordinado entre el Ministerio de Trabajo y las municipalidades para favorecer con un servicio público, de carácter gratuito, la interacción de la demanda y la oferta laboral.
Además, mejorar sustancialmente la capacidad de compra del salario de los trabajadores y el cambio de la metodología para determinar los aumentos de salarios por sectores, tomando en cuenta otros criterios, más allá de los índices de inflación y precios al consumidor, lo que supone un compromiso serio de reformas de los mercados y servicios.