SANTIAGO. El tenis de mesa de República Dominicana volvió a demostrar en la final del XII Clásico Internacional Rolling que su categoría está al nivel del impresionante escenario de la Gran Arena del Cibao.
Aún no, quizás es mucho pedir, hasta un exceso, en lo cuantitativo, pero no tanto por lo cualitativo, en comparación con otra disciplina. Quien asistió pudo comprobarlo tras los emocionantes finales de la mayoría de las 15 categorías expuestas y un cierre espectacular entre el boricua Héctor Berríos y la estelar raqueta del tricolor patrio Samuel Gálvez, que puso fin a la hegemonía montada por Berríos, ganador de cinco de las ediciones anteriores. Le ganó 3-1. El venezolano Marco Navas, tuvo que conformarse con el tercer lugar, en la justa.
Valdez en femenino
Johenny Valdez, luego de varias ausencias y un título sobre sus hombros, volvió a subir al podio en el tradicional certamen, se impuso a la prometedora Smerling Castro, 3-1, coronándose una vez más.
Kircia Díaz terminó en el tercer peldaño.
El soporte de Panam, Recicladora del Cibao, Linda, Caribe Media, Pets, Aeropuerto Cibao, Miderec, Peligro Sport y Lotería Nacional, BanProgreso, Coraasan y Molinos Modernos, hicieron posible el montaje de la competencia que avala la Federación Dominicana de Tenis de Mesa (Fedoteme).
Stokhamer y Arzeno
En las categorías Máster A y B el alemán Daniel Stokhamer y el santiaguense Luis Arzeno se convirtieron en nuevos monarcas.
Stokhamer ejerció dominio entre los A, superando 3-1 a Leicester Florimón, mientras que Arzeno dispuso en un dramático cierre de Mateo Olivares, 3-2, un último que se convirtió en una especie de 2 por 1 (23-21). Alvin Arias, en desafío frente a Odalis Gómez, venció el tercer puesto.