El alero de los Boston Celtics, Gordon Hayward, se despojó de su botín el miércoles, menos de dos meses después de su horrible lesión en el partido de apertura del equipo en Cleveland.
En el último paso en su recuperación de una fractura en el tobillo, Hayward obtuvo el visto bueno de sus médicos para irse sin la bota el miércoles.
Con solo un pequeño corsé en el tobillo izquierdo, Hayward pudo caminar sin ayuda en un evento comunitario en el Boys & Girls Club de Boston.
«El proceso siempre es fluido y puede cambiar en cualquier momento, pero, para mí, hoy fue el día en el que camine sin la bota en absoluto», le dijo Hayward a ESPN antes de dar un discurso de motivación a un grupo de adolescentes y reproducir el video juego Destiny 2 con ellos.

«Y entonces, voy a tratar de seguir adelante sin la bota. Dependiendo de cómo reaccione mi pie, de cuánta actividad pueda hacer sin dolor, podría regresar a la bota o podría nunca mirar hacia atrás y nunca volver a ver la bota.
«Simplemente lo estoy tomando día a día; hoy ha sido impresionante hasta ahora sin la bota».

En las últimas semanas, Hayward se ha graduado de disparar desde una silla a disparar con los pies descalzos y su bota.
Cada paso en su recuperación genera preguntas sobre si podría regresar esta temporada.
Por su parte, el estelar jugador que llegó este año a Boston ha dicho que simplemente está concentrado en cada día y ansioso por ver a dónde lo lleva esto.