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Tres niños de cinco años de edad y que fueron ingresados en el hospital Robert Reid Cabral, afectados de difteria, murieron esta semana, con lo que la cifra se eleva a nueve muertos en lo que va de año. En este año ha habido una mortalidad por esa causa de un 45 por ciento.
La difteria es una enfermedad controlada y que se previene por una vacuna que fue creada hace más de 100 años.
Las doctoras Josefina Fernández, Chabela Peña y Clemente Terrero mostraron a HOY los registros de niños que han sido ingresados al hospital y expresaron preocupación por las bajas cobertura de vacunación.
Los muertos de ayer son Yendry Linares Ruiz, masculino de un año y oriundo de la comunidad de Los Guaricanos, Seliné Jiménez Pimentel, una niña de cuatro meses, que fue llevada al hospital desde Baní y el muerto es Moisés de La Cruz, un niño de cuatro meses y oriundo de Yamasá.
Durante los cuatro meses que han transcurrido del año han sido ingresados 22 menores que padecen difteria, una enfermedad prevenible por vacunas y cuya inmunización fue descubierta hace más de 100 años. La cifra duplicó la del año pasado.
Durante el año 2003 fueron ingresados 19 niños con difeteria, de ellos murieron 12.
Los últimos tres niños menores de cinco años murieron el martes y durante el día de ayer, confirmaron médicos de la unidad de Infectología de ese hospital.
En ninguno de los casos registrados, ni en los muertos, hay historia de vacunación, mientras se supo que en uno de los casos, la madre se negó a que el niño fuera inmunizado.
La vacuna para combatir esa enfermedad es denominada Difteria, Pertusis y Tétanos (DPT) y al estado le resulta relativamente barata, se estima que le sale a menos de US$0.50 de dóllar.
Las especialistas aseguraron que sólo durante el día lunes, fueron ingresados tres niños con difteria, los tres murieron, a pesar de los estudios y la aplicación de medicamentos.
Los tres infantes eran de Yamasá, Baní, en el Sur, y de Guaricano, en el municipio Santo Domingo Norte.
El año pasado se registraron 17 casos de difteria en ese mismo hospital, este año a sólo cuatro meses del año, la cifra es de 22 y los muertos ya son nueve.
La enfermedad es infecto contagiosa, pero la vacuna que la combate es altamente positiva, expresó la doctora Fernández, quien recomendó que las personas sean vacunadas cada 10 años. Las principales manifestaciones son respiratorias.
El doctor Terrero y la doctora Peña, ambos de la Unidad de Infectología de ese hospital también expresaron preocupación, porque la enfermedad indica que la vacunación no se aplica.
La bacteria que causa la difteria fue descubierta en 1883 y tiene el nombre de Corynebacterim Diphtheriae. El bacilo que produce la enfermedad penetra en el organismo a través de la boca o la nariz y efecta las membranas mucosas, en donde se multiplica y produce una toxina potente.
«Esa toxina lesiona el corazón y sistema nervioso central y puede producir la muerte, pues la membrana grisácea que se forma puede obstruir la respiración de los infantes», dijo Fernández.
La enfermedad tiene un período de incubación de dos a cinco días, causa fiebres leves, dolor de cabeza, taquicardía, dolor al tragar, muchos ganglios en el cuello y en las mandíbulas.
