Pese a su estatura de 6’4, Moisés Hernández nunca ha tenido inclinación por deportes de conjunto, como el baloncesto o voleibol, ni tampoco le surgió interés por la práctica del béisbol, considerado el deporte rey de los dominicanos.
Ni siquiera el hecho de que uno de sus hermanos, Wilfrido Hernández, ya descollaba con la selección nacional de voleibol.
“Me considero un apasionado de los deportes de combate”, plantea el destacado miembro de la selección nacional de taekwondo.
Hijo de Hotilio Hernández y Anatasia Encarnación. Moisés es el menor de siete hermanos.
Antes de su incursión en el taekwondo, practicó boxeo y karate en su pueblo natal, San Juan de la Maguana.

Confiesa que se inició en la práctica del taekwondo desde los 15 años.

Es miembro del Ejército de la República Dominicana, donde ostenta el rango de sargento.

Establece su residencia en Santo Domingo cuando tenía 18 años de edad.

En San Juan compartía su tiempo entre los estudios en el colegio y la práctica del deporte.

Hacer deporte implicaba grandes sacrificios, debido a que residía en un barrio ubicado en las afueras de San Juan de la Maguana (Corbano Sur) y debía recorrer importantes distancias para llegar hasta el complejo deportivo.

“Procede de una familia de escasos recursos económicos”, confiesa.
Motivación. La decisión de abandonar la práctica del boxeo y el karate le vino motivado porque algunos sanjuaneros ya estaban descollando en el taekwondo.

“Eran miembros de la selección nacional y gozaban del reconocimiento de mi pueblo y el país”, dijo.

Citó entre ellos a Mario Alberto Mateo, Ruddy Mateo, César Martínez, Eduard Espinosa, Pedro Morales, entre otros.

“Pero mi mayor inspiración para incursionar en la práctica del taekwondo la recibí de mi hermano, Wilfrido Hernández, que ya era selección nacional de voleibol”, agregó.

“El, mi hermano, fue mi mayor motor, mi más grande inspiración”, dijo.

Afirmó que en algún momento se planteó llegar hasta donde lo había logrado su hermano, solo que en otro deporte, el taekwondo.
“Y no me arrepiente de la decisión que tomé, porque en siete años como miembro de la selección nacional he recibido grandes satisfacciones”, dijo.

Moisés Hernández, entre sus víctimas figura el actual campeón olímpico
Moisés Hernández es una de las principales esperanzas de medallas con que cuenta la República Dominicana, no solo para los Juegos Panamericanos, a celebrarse este año en Lima, Peru, sino también para los Juegos Olímpicos Tokio 2020.
Y es que el nativo de San Juan de la Maguana ha sido capaz de vencer a rivales de todos los niveles, incluido al actual campeón olímpico, Cheick Sallah, de quien dispuso en el Abierto Mundial Copa Presidente, en Las Vegas, Nevada, en el 2017, donde el dominicano se alzó con el oro de menos de 80 kilogramos y el galardón de Atleta Más Valioso.
Pero en su lista también se suman entre sus víctimas al estadounidense Steve López, cinco veces campeón mundial y en dos ocasiones campeón olímpico.
Además le ha ganado en dos ocasiones a Damon Sansun, dos veces sub campeón mundial.
“Su talento es ilimitado”, confiesa el presidente de la Federación Dominicana de Taekwondo, Francisco Camacho.
Resalta que actualmente, Moisés ocupa el puesto ocho en el ranking olimpicoo y el siete en el ranking mundial.
“Y no está mejor posicionado debido a que no ha podido participar en algunos de los eventos puntuables por falta de apoyo, mientras que sus competidores asisten a todos. Tiene esa desventaja, sino tuviera entre los primeros cinco”.