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Cuando Fred Archer hizo su arribo a la hípica británica, George Forhan, primero en el mundo en anexarse 6 triunfos en una función, era el dueño de la situación.
Pero muy pronto Fordham se vio desbancado por el empuje irresistible del flamante astro. Fordham había ganado 14 campeonatos, 9 de ellos sucesivos. Archar lo tumbó del pedestal.
No lo dejó obtener un cetro más, coronándose en 13 calendarios consecutivos. Y hubiera podido seguir capturando campeonatos pero adelantemos a la víspera.
Los motivos de que esa interrupción los dejaremos para otra entrega.
Si Fordham había ganado 6 de 7 carreras en un programa, Archer fue el primero en lograr 6 a 6 en 1877. Después, en 1886, también impondría una nueva marca de 240 victorias en una temporada, superada por Richard hasta 1934.
Es decir, como el César, Fred Archar llegó, vio y venció. Se tornó en una de las figuras más recias y populares de la Gran Bretaña pese a que su vida desembocada inexorable, fatalmente hacia una terrible tragedia. Elegante bien parecido era el mimado de la suerte. Pero un aciago destino lo encaró de pronto.

LUISMARQUEZ30@ CLARO.NET.DO