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Al deportista Sievier, esto nunca le preocupó, pero en esa ocasión tenía necesidad apremiante de saldar su deuda, so pena de ser expulsado del turf. Cuando Sievier hizo saber que estaba dispuesto a deshacerse de Duke Westminsters o Sceptre, o ambos, George Faber comisionó a John Porter los inspeccionara y comprara uno de ellos. Porter llegó y después de examinar los caballos pidió los precios Sievier fingió pesar y luego dijo 22,000 guineas por Duke Westministers y 15,000 por Sceptre. No. Creo que Sceptre lo dejaré en 13,500, Charles Morton, el entrenador de los caballos de Sievier, estaba presente e hizo un gesto de asombro, indicador de que creía que su patrón estaba loco pues sabía que Sceptre era por mucho el mejor de los dos corredores. La trampa de Sievier dio los resultados que buscaba. Puesto que la indiferencia clara era que algo malo tenía Sceptre, Geoge Faber compró a Duke of Wesminger, que resultó un completo fracaso. Sceptre siguió a ganar los 1,000 Guineas 2,000 guineas el Oakes y el St. Leger, entrenada por el formidable Sieviert. Al final de una temporada, cuando Sieviert era líder de los propietarios, se volvió a encontrar en apuros económicos y vendió a Sceptre a Sir William Bass.