El manto de la tragedia arropó ayer la barriada del Respaldo Los Próceres, del Distrito Nacional, cuando un hombre mató de dos disparos a su expareja, tras una discusión en la azotea de su residencia, en la calle Primera.
Juana Bautista Estela Pineda, de 50 años, murió por dos impactos de bala a manos de su exesposo, Eduardo Marte Calderón, con quien mantuvo una relación de 32 años y en la cual procrearon dos hijas.
Según vecinos, estos estaban separados desde hace varios meses, y contra el victimario había una orden de alejamiento.
Aunque pocos quisieron hablar sobre el hecho de sangre que ha consternado a toda la barriada, los que opinaron dijeron que los celos fue el factor que provocó el crimen.
Tanto Estela Pineda como Marte Calderón tenían una conducta intachable en el vecindario, pese las diferencias que tenían.
“Ellos se habían dividido sus cosas, pero él tenía sus sentimientos porque duraron 32 años juntos”, dijo Juan Ortiz, hermano de crianza del victimario. Explicó que Calderón seguía enamorado de Pineda y no se adaptó a la separación y que ella estuviera con otro.
Tras la ruptura ellos separaron sus bienes, pero el victimario iba a ver sus nietos frecuentemente, encontrando en ocasiones a su expareja con otro hombre.
“Nosotros le aconsejamos que no la visitara, porque eso le iba a remover los sentimientos profundos que tenía, pero él no hizo caso. El no soportó verla así”, agregó Ortiz.
Con este suman dos feminicidios en esta semana. El martes, en Sabana Perdida, Junior Martínez mató a su expareja, Yariza Valdez, y luego se suicidó.