El imputado del fraude al Banco Peravia, Nelson Cabral, pidió le fuera asignado un defensor público, alegando que no tiene recursos para pagar un abogado. Por esta razón fue aplazada la audiencia preliminar, del proceso que se le sigue a 20 acusados de la quiebra de la entidad bancaria.
Este encartado fue el que en diciembre del año pasado dijo no tener abogado porque no tenía dinero, ya que el fiscal del caso, Isidro Vásquez le había quitado 125 mil dólares para no incluirlo en el expediente.
Por esa acusación Vásquez, quien primero fue suspendido del Ministerio Público, fue enviado a juicio de fondo por el Tercer Juzgado de Instrucción del Distrito Nacional, en espera de que se fije audiencia.
En su momento se dijo que con esta imputación, Cabral buscaba debilitar el proceso. El exfiscal dirigía el departamento de casos mayores y junto a la titular llevaban el expediente.
La jueza del Primer Juzgado de Instrucción, Keila Pérez, fijó la audiencia para el 25 de noviembre a las 10 de la mañana.
Ese será el tercer encuentro para realizar un juicio, pruebas por la estafa bancaria, que según la fiscal del Distrito Nacional, Yeni Berenice Reynoso, supera los 3 mil millones de pesos.
Ayer, además de los imputados declarados prófugos, faltaron querellantes.
Abogados cuestionaron que la magistrada, en vez de excluirlos del proceso, les diera otra oportunidad para comparecer.