B.N. Srikrishna es un genial exjuez de la Suprema Corte que tiene 77 años y recita a Shakespeare y escrituras en sánscrito con igual facilidad. Pero está poniendo a firmas como Google, Amazon y Facebook algo más que un poco nerviosas.
Srikrishna encabeza el intento de elaborar nuevas leyes de privacidad de datos para India que regularán la forma en que los gigantes tecnológicos de los Estados Unidos y otros países operarán en el país de mil 300 millones de habitantes. Sus recomendaciones tienen especial peso porque India ya es el mayor mercado de compañías como Facebook y ofrece enormes posibilidades a otras decenas de empresas. El comité que dirige Srikrishna enviará su proyecto de ley al Gobierno esta semana.
Va mucho más allá del abordaje estadounidense que antecedió a episodios como el de Facebook, que facilitó la intromisión rusa en la elección presidencial de 2016, o el hackeo de Equifax, que expuso la información personal de unos 145 millones de personas. El exjuez y sus colegas están decididos a modernizar las normas del país y proteger a todos los ciudadanos.
“India ha acelerado el paso de una economía ‘bail gaadi’ a una economía de chips de silicio. Pero la regulación sobre privacidad y datos aún está muy rezagada”, dijo Srikrishna utilizando la expresión hindi para ‘carro tirado por bueyes’, expresa.
India ha hecho un avance sesgado en la era digital. La cantidad de personas que tienen teléfonos inteligentes ha crecido de 25 millones en 2012 a 370 millones de usuarios a fines de 2017, según Counterpoint Research.
El Gobierno también ha desarrollado uno de los sistemas biométricos de identidad más ambiciosos del mundo, llamado Aadhaar, que asigna 12 dígitos únicos a mil 100 millones de indios y registra sus huellas digitales, iris y detalles demográficos.
Esa información se usa ahora para todo, desde declaraciones de impuestos y compras de propiedades, hasta para desembolsos de bienestar social y pagos por Whatsapp.
Ese flujo de datos, sin embargo, y una ausencia de regulación, han alimentado los temores de grupos de ciudadanos y activistas de privacidad, lo cual se ha visto agravado como consecuencia de prácticas gubernamentales, comprendido un reciente error de la provincia sureña de Andhra Pradesh que expuso sin advertirlo los detalles bancarios y demográficos de 130 mil personas.
“Una India pobre en información se convierte con rapidez en una economía rica en información, de modo que es vital tener una ley de protección de la información”, comentó Srikanth Nadhamuni, máximo responsable de la incubadora de startups Khosla Labs y ex máximo responsable de tecnología de Aadhaar.
Srikrisha, un hombre canoso y de baja estatura, analizó el debate durante una entrevista realizada en su oficina en Bombay, que es tan pequeña que las sillas para los visitantes impiden que la puerta se abra del todo.