La falta de titulación de terrenos en predios agrícolas del país impiden que capitales extranjeros realicen inversiones millonarias en plantaciones de cacao para fines de exportación.

Ante esa situación, estos capitales de inversionistas europeos y norteamericanos se van a países de Suramérica, como Ecuador, Colombia y Perú, donde hay seguridad jurídica de la tierra e incentivos para la inversión.

Sobre el tema fue entrevistado el director ejecutivo de la Confederación Nacional de Cacaocultores Dominicanos (Conacado), Isidoro de la Rosa, quien informó al país han venido muchos inversionistas con interés de invertir en el subsector cacao, pero se han encontrado con que hay muchos problemas con la tierra. Entre esos problemas, citó que han hallado dificultades con la tierra, “muchas no están saneadas y las que lo están no están claras jurídicamente. Además no hay incentivos a la inversión, como en Ecuador, Colombia y el Perú”.

Por eso, agregó, la mayoría de las inversiones europeas y estadounidenses se van a esos países sudamericanos, donde se siembran inmensidades de tareas, lo que significa que en los próximos años América Latina va a crecer enormemente en la producción de cacao, pero República Dominicana podría quedarse atrás.

Expresó que hace 15 años Ecuador y República Dominicana estaban al mismo nivel en la producción de cacao convencional y Ecuador ya produce 5 veces más que Dominicana.

Indicó que “el competidor de nosotros en cacao orgánico es el Perú, porque el gobierno de ese país está incentivando a los productores con donaciones y créditos. Además la Agencia Internacional para el Desarrollo, de Estados Unidos, está donando muchos recursos para sustituir la coca por el cacao, lo que está incentivando la siembra de ese cultivo en Perú”.

De la Rosa recordó que “el país es todavía líder en exportaciones de cacao orgánico y de alta calidad. El mercado internacional ha crecido más en chocolate de alta calidad que el chocolate de media o baja, por lo que la demanda de un cacao orgánico y de calidad va a seguir creciendo, porque es el nicho que más crece por las cualidades de salud del chocolate negro y porque el consumidor está prefiriendo pagar un chocolate más caro, bueno y de alta calidad que un chocolate azucarado que es lo que normalmente se vende en el mercado”.

Apoyo Gobierno. En los últimos años, el Gobierno del presidente Danilo Medina ha apoyado bastante a grupos de pequeños y medianos productores de cacao, pero se carece de un sistema financiero que promueva en gran magnitud la inversión en el sector y además falta una infraestructura de apoyo en material de siembra e insumos para promover la tecnología que se ha desarrollado en la producción de cacao en los últimos años, según De la Rosa.

“El gobierno, a través del FEDA ha financiado proyectos de cacao. Por ejemplo, Ecuador, ha promovido y ha tenido mucho éxito en la siembra intensiva y comercial del cacao, usando la tecnología de riego y la intensidad de los insumos”.

Dijo que aunque el país todavía es el líder mundial en cacao orgánico, debería fortalecerse esa posición promoviendo la producción orgánica y garantizar que el cacao, que es prácticamente un reservorio de agua, capte el agua y la infiltre de una manera sana y no contaminada a los acuíferos que alimentan los acueductos del país.

Créditos de carbono. Con el Acuerdo de París se está promoviendo la siembra de árboles agroforestales, como el cacao, los frutales, café y los maderables para que eviten la desertificación, conserven el agua y promuevan la captura de carbono, a fin de reducir el calentamiento climático que afecta toda la climatología mundial.
Los países que hagan eso podrán recibir dinero por la captura del carbono que representa la siembra de árboles frutales y forestales, expresó el director ejecutivo de Conacado.

“En este país el 80% del agua que cae se va al mar. Es ya un asunto de supervivencia promover la reforestación y la mejor opción para promoverla es sembrando árboles, como el cacao, el café y los frutales que además de conservar la naturaleza generan riqueza y divisas. Esos fondos andan buscando oportunidades. Lo que el país necesita es generar una legislación que le asegure a esos fondos una rentabilidad adecuada y la seguridad de su inversión”.