Los setos vivos resultan una bella opción para las personas que buscan una solución a sus espacios, contribuyendo de este modo al mejoramiento del ambiente.
Se conoce como seto a la delimitación de arbustos que forman una fila entre sí para crear una barrera de plantas. Generalmente es usado para delimitar espacios en un jardín, entre las distintas áreas o entre las propiedades vecinas.
¿Cuáles plantas utilizar? Las opciones a la hora de elegir cuáles plantas utilizar para comenzar su seto vivo son inmensas.
Usted puede emplear las conocidas trepadoras o enredaderas, que utilizan una serie de recursos para elevarse sobre otras plantas o sobre algo que pueda sostenerlas, como un muro, una pared…
Si opta por éstas, existen varios tipos de trepadoras, por lo que usted tendrá la opción de decidirse por la que mejor se acomode a sus necesidades.
Así mismo puede elegir plantas de croton, también llamada croto Variegado y codiaeum. Esta es una planta veraniega de hojas perennes que puede llegar a crecer hasta más de tres metros de altura.
Rafael Amaro, propietario de la Jardinería Atapaima, recomienda utilizar, entre otras, plantas como las palmas cola de zorro, así como el podocarpus o el bambú semi enano, entre otras que se adaptan perfectamente al clima tropical que caracteriza este país.
¿Cómo cuidarlas? Amaro explica que los setos vivos deben ser regados una vez al día.
Especifica que no es recomendable regarlas en la tarde, al caer el sol, ya que la arena se encuentra caliente y las plantas no aprovecharán los nutrientes de una mejor manera.
Explica que se debe mojar bien temprano en la mañana, antes de que salga el sol, para que la arena absorba toda el agua y las plantas no sean tan maltratadas por los rayos solares.
“La persona que moja su plantas bien temprano, tiene sus plantas con su verdor original y se mantienen más saludables”, asegura Amaro.
En cuanto al abono, el especialista en plantas explica que se deben abonar por lo menos cada dos meses con un abono granulado.
Mantenimiento. Los setos necesitan ser podados cada cierto tiempo.
Por lo general, se debe realizar un mantenimiento mensual que incluya quitar posibles malezas y podarlas, para evitar que pierdan la forma o que sobrepasen el límite de altura deseado, aconseja el experto en jardinería.