La puertorriqueña Zuleyka Rivera disfruta de sus últimas horas como Miss Universo, ya que hoy  se elige a la nueva reina de la belleza 2007, en la capital mexicana

MEXICO,  (EFE).-    Las 86 aspirantes al título se mostraron seguras y aparentemente tranquilas en su última ronda de entrevistas con la prensa, el pasado viernes, aunque algunas acusaban el cansancio de la intensa agenda de apariciones públicas que han vivido este mes.

Desde su llegada a principios de mayo a México, país anfitrión del concurso este año, las «misses» han tenido que acostumbrarse a madrugar para cumplir con lo planeado por la organización. 

 Una agenda que será aún más intensa en caso de que sean elegidas Miss Universo, como la que ha vivido Zuleyka desde el año 2006.

La ceremonia de elección y coronación  se llevará a cabo en el Auditorio Nacional de la capital mexicana y será retransmitida a 170 países por las cadenas NBC y Telemundo, y la organización espera una audiencia cercana a los mil millones de personas.

 En el evento estará presente el propietario de la franquicia de Miss Universo, el famoso empresario estadounidense Donald Trump, según dijo a la prensa la ex Miss Universo mexicana Lupita Jones (1991).

Entre las celebridades invitadas a sumarse al jurado están el músico Dave Navarro, ex guitarrista de los Red Hot Chili Peppers y ex marido de la modelo Carmen Electra, la ex Miss Universo puertorriqueña Dayanara Torres (1993) y el actor James Kyson Lee, ‘Ando’ en la popular serie de la cadena NBC «Heroes».

 Esta semana el jurado eligió a quince semifinalistas, aunque no dará a conocer quienes son hasta la ceremonia de mañana.

 Uno de los nombres que más suena en los medios como favorita es el de la Miss Venezuela, Ly Jonaitis. Otras dos misses bien situadas podrían ser la mexicana, Rosa María Ojeda Cuen, y la española, Natalia Zabala.

«Lo veo muy difícil, la prensa me ha dicho que estoy entre las favoritas pero prefiero no hacerle caso a esas cosas, porque luego al final muchas veces no ocurre nada», afirmó el viernes la aspirante española.

Las candidatas, establecidas en la capital mexicana, han podido visitar los sureños estados de Quintana Roo, a orillas del Caribe mexicano, y Chiapas, uno de los más verdes del país.

   Fue en este último donde algunas bellezas tuvieron un pequeño susto con un cocodrilo mientras recorrían el Cañón del Sumidero en lancha.

   Al parecer, se acercaron a la orilla para admirar a uno de estos reptiles que dormía, pero al pasar cerca otra lancha a gran velocidad, el animal se despertó y se lanzó al agua cerca de las misses, no hubo mayor percance todo, quedó en anécdota.

   En Quintana Roo, las reinas pudieron conocer las playas de Cancún, dónde posaron en traje de baño.

De vuelta en la capital fueron recibidas en Los Pinos, la residencia oficial del presidente mexicano, por la primera dama Margarita Zavala.

Quizás su aparición más vistosa fue el desfile de trajes típicos, donde Miss México, quien tuvo que cambiar su vestido semanas antes de este desfile por la polémica desatada a cuenta de su decoración considerada violenta, se dio un baño de masas.

Quien pasó un mal trago fue Miss Estados Unidos, Rachel Smith, que recibió el abucheo del público sin inmutarse.

Smith afirmó después que comprendía que no era algo personal, sino que se trataba de «algo más grande», como la política o la competencia deportiva, y que decidió responder «como una dama».

   «No estoy aquí para ser la próxima secretaria de Estado de mi país», dijo y se le ha visto, desde entonces, feliz e integrada  al evento.