La percepción socorrida de la ciudadanía se orienta por considerar que en los gobiernos del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), la corrupción denota niveles inauditos en muchos funcionarios, que luego de advenir otro gobierno y sean cuestionados en relación al origen de sus fortunas, es casi seguro que no podrán explicarlas ni justificarlas.
Hay una difusa percepción ciudadana de que el PLD ha forjado un grupo poderoso detentadores de grandes fortunas que rivalizan con el sector privado, que hicieron posible crear grandes fortunas en decenas y hasta centenas de años, y ahora se topan con que un advenedizo sector, con el soporte de la política, que ha conseguido fortunas rápidas y no pequeñas, lo enfrenta.
Se afirma, inclusive, que el sector económico poderoso del PLD, supera al tradicional sector privado, y eso causa graves tropiezos, porque con grandes fortunas y detentando el poder, los opulentos del PLD se desplazan en varios segmentos de fomentar la riqueza, al sector privado.
Los sondeos son reiterativos en destacar la percepción ciudadana en esta coyuntura, que podría culminar con la Era del PLD en el poder.
Es en esa imbricación peligrosa, que se ha pronunciado el Encargado de Negocios de los Estados Unidos en nuestro país, Robert E. Copley, al calificar de “grave la corrupción que impera en la nación dominicana”, conforme revelan los diarios, postulando ante el escenario de la Cámara Americana de Comercio, vale decir, la membresía de la cúpula empresarial.
El representante ante el gobierno dominicano del presidente Trump aludió al escándalo de de Odebrecht.
Quizás por eso es que Euclides Gutiérrez estima que EU no quiere que el PLD siga en el poder.