La inflación se traga presupuesto de las familias

La inflación se traga presupuesto de las familias

Este año, la inflación, además de encoger los bolsillos de la gente, se ha tragado sin compasión el presupuesto de las familias, especialmente de las más pobres.

Es así como, de acuerdo con los datos aportados por el Banco Central (BANCENTRAL) para finales de noviembre la tasa de inflación sobrepasó el 40%, superando todas las estimaciones y expectativas de la institución estatal, que esperaba que esta no superara el 35% al recién pasado mes de diciembre.

Según la cifra suministrada por el BANCENTRAL, la tasa de inflación ha registrado un aumento de un 263%, en términos relativos, al pasar de 11% en que llegó a situarse la inflación acumulada a diciembre pasado, a los 40% en que se estima, terminará para este año.

De acuerdo con estos cálculos, la República Dominicana podría entrar peligrosamente en el 2004, en el fenómeno conocido como estanflación, y, de acuerdo con economistas consultados, si las autoridades económicas de la presente administración no empiezan a poner en práctica una política coherente para aliviarla, el país estaría en peligro de entrar en un proceso hiperinflacionario.

La estanflación es un período de continua inflación combinada con recesión o estancamiento de la actividad económica y productiva, mientras que la hiperinflación es un período en el que las tasas de inflación son superiores al 1,000% anual.

[b]ASUNTO COMPLEJO[/b]

Aunque la inflación es simplemente una situación económica en la que la demanda es superior a la oferta, lo que desencadena un alza de los preciso y una depreciación de la moneda, son muchos y complejos los factores que inciden en ella. Esta se mide por el Indice de Precios al Consumidor (IPC).

Pero si usted no lo sabía, la inflación también es la aplicación de erradas políticas monetarias y fiscales, como lo ha sido el aumento del déficit cuasi fiscal del Banco Central por la emisión de fuertes cantidades de dinero inorgánico para el auxilio de entidades financieras quebradas.

[b]DÉFICITS PRESUPUESTARIO[/b]

Además, es bien sabido por todos, que los déficits presupuestarios financiados mediante la creación de dinero, generan, a su vez, inflación. Por tanto, la utilización de la creación de dinero para financiar el déficit presupuestario es otra forma de impuesto: El impuesto a la inflación.

No obstante, una fuente de cambio de la demanda real de dinero son las innovaciones financieras (unas veces malas prácticas monetarias), que producen cuasi dineros (léase déficit cuasi fiscal del Banco Central) y nuevos métodos mucho más dañinos para las economías, como el uso de dinero inorgánico, para que las economías domésticas realicen la misma cantidad de transacciones con menos saldos reales, lo que a su vez provoca inflación.

Sin embargo, la financiación de los déficits presupuestarios mediante la creación de dinero, tal vez sea la única forma que tienen los gobiernos «débiles», de cobrar impuestos al sector privado. Es por ello que Keynes, el padre de la economía moderna, escribiendo sobre el tema, hizo la siguiente observación:

«Un gobierno puede durar mucho tiempo imprimiendo papel dinero; es decir, de esta forma puede asegurarse el dominio de los recursos reales, recursos tan reales como los que se obtienen mediante impuestos. Aunque el método es «condenable», debe admitirse su eficiencia hasta cierto punto. Un gobierno puede vivir de este modo cuando no puede hacerlo de ningún otro. Es la forma de tributación que el público encuentra más difícil de evadir e incluso que el gobierno más débil puede hacer cumplir, cuando no puede obligar a cumplir ninguna otra cosa».

Estas observaciones la hizo Keynes en 1923 y a principios del 2004, todavía se aplica en la República Dominicana.

[b]DESEQUILIBRIO[/b]

También, algunos economistas observan un desequilibrio en el monto del presupuesto del Estado para el 2004 que asciende a RD$120,927 millones, en relación con el aumento porcentual de la inflación. El aumento del presupuesto del Estado sobrepasa por un porcentaje sorprendente, el incremento porcentual de la inflación. Pero el presupuesto fiscal no debe exceder el porcentaje de la inflación, advierten los economistas.

[b]LO QUE DICE BANCENTRAL[/b]

Según el Banco Central, la inflación correspondiente al mes de octubre (último mes desglosado), medida por la variación del IPC, registró un crecimiento de 2.59%, con relación al mes anterior, hecho atribuido principalmente a la tendencia alcista que ha experimentado la tasa del dólar.

Según el informe mensual elaborado por el Departamento de Cuentas Nacionales del Banco Central, ese crecimiento en el IPC contribuyó para que la inflación acumulada durante el período enero octubre se situara en 29.75%, en tanto que la tasa de inflación anualizada, medida de octubre 2002 a octubre de 2003, se colocó en 32.74.% y la promedio en 22.08%.

Los grupos de mayor incidencia en el Indice General fueron:

a) Alimentos, bebidas y tabaco y b) Transporte, los cuales experimentaron variaciones de 4.41% y 3.32%, respectivamente; es decir más del 75% de la variación correspondiente al mes de octubre.

En el índice relativo a los bienes alimenticios, la cebolla, arroz, tomate, café, atún, jamón, pollo, habichuelas rojas, bacalao y chuleta, fueron los que experimentaron mayores aumentos de precios.

Según la institución oficial, es importante destacar que la variación experimentada en el precio del arroz, fruto del dislocamiento del mecanismo de comercialización y el incremento de los costos operacionales del cereal, contribuyó de forma significativa al crecimiento del grupo alimentos.

Mientras que el incremento del índice del grupo transporte, obedeció al aumento de los precios de los vehículos, la gasolina y el ajuste del tipo de cambio.

En el mes de octubre, el índice de los bienes transables registró una variación de 3.04%, debido al aumento en los precios de los vehículos, gasolina, pasajes, café molido, tomate, atún y pasajes aéreos.

Mientras que los bienes y servicios no transables crecieron 2.21%, con relación al mes anterior, determinado principalmente por las variaciones de precios de varios productos como el arroz, habichuela, cebolla y leche en polvo.

En cuanto al índice por área geográfica, el resto urbano fue el que alcanzó la menor tasa de crecimiento, 2.36%, en tanto, que el Distrito Nacional y resto rural experimentaron 2.48% y 2.90%, respectivamente.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas