La libra esterlina osciló primero por los movimientos del petróleo y luego por los de las acciones estadounidenses, vaivenes que recalcan la susceptibilidad de la divisa ante un mercado volátil, meses antes de que el Reino Unido someta a votación su afiliación a la Unión Europea.
La libra esterlina borró su mayor declinación en más de una semana contra el euro, en tanto los mercados de acciones se recuperaban por las ganancias mejores que lo esperado este lunes. Más temprano, la moneda británica se debilitó luego del colapso de las conversaciones en Doha entre los productores de petróleo para limitar la extracción el domingo.
Como los inversores se preparan para más oscilaciones de los precios antes del referendo del 23 de junio, el ministro de Hacienda John Osborne advirtió este lunes sobre el daño “permanente” que significaría que el Reino Unido abandone la UE.
“La libra ha quedado atrapada en una gran aversión al riesgo”, dijo Ned Rumpeltin, jefe de estrategia de divisas de Toronto Dominion Bank en Londres.
“Dada la creciente susceptibilidad de la libra antes del referendo, no es ninguna sorpresa verla a la baja”, seguido de las noticias en Doha, comentó. La libra esterlina había cambiado poco y estaba a 79,35 peniques por euro a las 16:31 hora de Londres, después de tocar 79,94 más temprano, el nivel más bajo desde el 12 de abril. La libra avanzó 0,5 por ciento a $1,4271.
Inversiones de riesgo. El costo neto de los contratos de tres meses de cobertura contra pérdidas de la libra versus el dólar aumentó 4,79 puntos porcentuales la semana pasada.
El más alto desde que Bloomberg comenzó a recopilar información de inversión de riesgo en 2003. Y aunque la libra se recuperó contra el dólar la semana pasada, nuevamente se encuentra abajo frente a todos, excepto a uno de sus 16 pares en abril, consolidando su estatus como la principal moneda con peor desempeño en 2016.
La decreciente expectativa de un aumento en las tasas de interés del Reino Unido también ha contribuido al debilitamiento de la libra este año y las minutas de la última reunión de políticas del Banco de Inglaterra, publicadas el 14 de abril, muestran que los funcionarios han considerado en su decisión las implicaciones de abandonar la UE.
“Los comentarios del Banco de Inglaterra sugieren que independientemente de salir o permanecer en la UE, el referendo del Brexit puede ser negativo en cualquier caso: el voto por permanecer conduciría a aumentos en las tasas de cambio, perjudicando las exportaciones y haciendo aún más incierta la búsqueda de una mayor inflación”, dijo Jean- Michel Six, economista en jefe para Europa, Medio Oriente y África de Standard & Poor’s, en una nota por correo electrónico el lunes.