MARINA GINEBRA DE BONNELLY
No es un secreto que las personas con sobrepeso suelen enfrentar diversos problemas a la hora de comprar ropa, subirse a un carro o hacer cualquier otra actividad física. Ahora, de acuerdo a informaciones en la prensa internacional, a las personas con sobrepeso u obesas no solo les será complicado viajar en avión debido a la limitación de espacio, sino que les saldrá más caro esa modalidad de viaje que a cualquier otra persona con peso normal.

Según estas noticias, las autoridades aeronáuticas internacionales están estudiando la solicitud de varias aerolíneas para regular los precios o tarifas para el transporte de personas obesas a bordo de los aviones, alegando asunto de costos por peso así como de la comodidad para los demás pasajeros.

Actualmente no existe procedimiento oficializado alguno que regularice las aerolíneas en cuanto al transporte de personas con sobrepeso. Es práctica, en la mayoría de las aerolíneas, aplicar procedimientos internos o simplemente dejar al criterio de sus empleados encargados del chequeo, de decisión de asignar el asiento que le tocará al pasajero en cuestión.

Algunas aerolíneas tienen lo que llaman “extra seat” o asiento extra, el cual suele ser asignado para estas personas especiales. Este “extra seat” no es nada más que un asiento un poco más amplio que la mayoría, localizado en algún lugar de mayor amplitud en la aeronave, puede ser un pasillo o en un lateral (de acuerdo al tipo de la aeronave), que permite una mayor amplitud sin que sea una molestia para dicho pasajero y para los demás.

Una opción que tiene la mayoría de las aerolíneas es la de asignar al pasajero un asiento adicional gratuito (en caso que existan en ese vuelo suficientes asientos libres a bordo) o de otra manera venderle dos asientos en clase económica, lo cual no siempre es viable, pues en ocasiones el volumen del pasajero sobrepasa la posibilidad de esta alternativa. La otra opción es la de proponer a la persona de sobrepeso que compre un asiento en la clase primera o de negocios, pues de lo contrario el pasajero no tendrá alternativa para tomar ese vuelo. Esta opción conlleva un precio considerablemente superior a lo que pagaría por dos asientos de clase económica.

Debido a estas situaciones que continuamente se presentan en los aeropuertos es que ha surgido la necesidad de regularizar esta situación y hasta la fecha las medidas que se están estudiando son las siguientes: El peso para considerar una persona obesa -sería de 120 kilos o más; otra medida sería que aunque usted no llegue al peso mínimo establecido pero por su volumen los apoyabrazos no pueden ser bajados (esta es la división o frontera de los asientos entre pasajeros) sería considerado obeso; y por último también se tendrá en cuanta el “pitch” (distancia ente asiento delantero y trasero) del avión a utilizar.

Es importante señalar que en aviación existe una regla bien definida y es la prohibición de que ancianos, niños o personas con sobre peso de más de 100 kilos ocupe lugares de salidas de emergencias.

Para su próximo viaje en caso de considerarse con sobrepeso, le sugerimos que al hacer su reserva, comunique sus necesidades a la persona que le esté atendiendo, para que de esta forma se le pueda brindar un mejor servicio y el de evitarse sorpresas desagradables en lo que a precios de boletos se refiere al momento de su salida.