El mercado mundial de ordenadores personales sigue en caída libre y acumula ya seis trimestres consecutivos de descenso. Según los datos preliminares de Gartner, las ventas cayeron un 9,6% en el primer trimestre hasta situarse en 64,8 millones de unidades, la cifra más baja desde 2007. Desde ese año, nunca se había cerrado un trimestre con ventas por debajo de los 65 millones de unidades.
IDC, otra de las consultoras que analiza el mercado de PC, eleva el descenso trimestral hasta el 11,5%, cifrando en 60,6 millones de unidades la cifra total de equipos comercializados.
Gartner explica que las ventas se están viendo afectadas en muchas regiones por la fortaleza del dólar. Además, el mercado muestra gran atonía en países emergentes, donde los consumidores prefieren destinar el presupuesto tecnológico a la compra de móviles inteligentes. En el segmento empresarial, aún no se ha notado un efecto positivo de renovación del parque ligado a Windows 10, algo que sí podría producirse en la recta final del año.
HP ha experimentado la mayor caída del trimestre, que Gartner sitúa en un 9%. La consultora explica que el descenso se debe a la nueva estrategia de HP Inc (la compañía resultante de la segregación de la antigua Hewlett-Packard en dos unidades), que ha mostrado su intención de no competir en los segmentos de bajo precio, una estrategia que penaliza sus ventas en términos de volumen de unidades.
De hecho, en Estados Unidos Dell ha conseguido arrebatar a HP la primera posición del ránking. En este mercado, las ventas de Dell han crecido un 3,1%, mientras que las de HP han caído un 17,3%.
Lenovo, que se mantiene líder con un 19,3% de cuota, ha registrado una caída de las ventas del 7,2%. De hecho, de las cinco primeras compañías del ránking tan sólo Asus y Apple han logrado cerrar el trimestre en positivo, con ligeras subidas del 1,5% y el 1%, respectivamente.
En la región de Emea (Europa, Oriente Medio y África), las ventas han caído un 10% hasta 19,5 millones de unidades. Dentro del mercado de Europa Occidental, los países más estables han sido Alemania y Reino Unido.
En 2015, las ventas mundiales cayeron un 10,4%, hasta 276 millones de unidades, según datos de IDC, unas cifras similares a las de 2007.