La migración masiva y organizada de haitianos, a razón de 50,000 a 200,000 por año, debería plantearse como una política migratoria del Gobierno de Haití, a los fines de mantener una economía que sobrevive de las transferencias económicas.

Esa posición fue planteada por el periódico Le Nouvelliste, en su editorial del pasado jueves titulado “Dejar Haití para desarmar la bomba de tiempo demográfica”.

De acuerdo con los argumentos presentados por el principal diario del vecino país, “hacer salir sin riesgo a más haitianos, a destinos seguros, haitianos bien preparados para hacer frente a las necesidades de los mercados de trabajo en los países hacia donde van, debería ser parte de nuestras políticas públicas”.