El expresidente Leonel Fernández advirtió ayer que si el país permite que todo que el que nazca en su territorio sea dominicano, con el tiempo la identidad nacional será perdida por un factor demográfico.
“Cuando nosotros planteamos el derecho de la nacionalidad, no es una ideología racista, ni xenofóbica, ni excluyente; lo que estamos planteando es la supervivencia de la nación y de la identidad de la República”, aclaró según una nota.

Recordó que ese país pagó un alto precio por su libertad, la comunidad internacional lo aisló para que su hazaña no sirviera de estímulo, más una inestabilidad política crónica que lo han sumido en la miseria y la desesperanza.
El texto indica que habló durante un conversatorio con el senador por Espaillat, José Rafael Vargas, con el que presentó su obra»Años de avances. Escritos de Teoría y Acción”. En la Feria del Libro de Miami.

El exmandatario explicó que Estados Unidos introdujo el «jus soli» a través de una enmienda constitucional después de la guerra civil en la que fue abolida la esclavitud, para garantizar el derecho de los antiguos esclavos.

Sostuvo que a diferencia, en la República Dominicana no existe el jus soli absoluto e incondicional, sino que ese mecanismo solo es válido para los hijos de los extranjeros que residen legales en el país.

En cuanto a Haití, dijo que la constitución de ese país establece que toda persona nacida de padres haitianos es haitiana.

A propósito, afirmó que la comunidad internacional debe involucrarse en el resurgimiento económico y el desarrollo de Haití.