Cada año, específicamente entre los meses de junio a noviembre, República Dominicana se ve ante la amenaza de fenómenos climáticos.
Han sido muchos los huracanes y tormentas que han impactado con gran ferocidad esta media isla, dejando cientos de víctimas fatales y grandes pérdidas económicas.

Para ser exactos, según registra la Oficina Nacional de Meteorología (Onamet), han ocurrido unos 76 fenómenos, entre éstos 44 ciclones y 32 tormentas tropicales.
Al menos 10 entre categorías 2 y 5 han causado grandes estragos en toda la nación, siendo los ciclones San Zenón, David y George los más devastadores.
En la actualidad, el país está bajo alerta por Irma, un huracán categoría 5 definido por las autoridades meteorológicas como el más intenso formado en el Atlántico.
Los efectos del mismo están pronosticados para sentirse a partir de esta noche en la medida en que se aproxima “cerca o justo al norte de la costa” del territorio nacional. Sus vientos alcanzan casi los 300 kilómetros por hora.
A continuación presentamos un recuento de los huracanes más devastadores que han pasado por el país:
San Zenón. Cuando recién comenzaba la dictadura de Trujillo, este huracán de categoría 4, devastó Santo Domingo en 1930, dejando un estimado de más de 4 000 muertos y 20 000 heridos. Sus vientos máximos estuvieron entre 210 y 248 kilómetros por hora, según registra la Onamet.
Inés. Penetró la nación el 29 de septiembre de 1966. Alcanzó la categoría cinco e impactó de forma directa la península de Barahona, provocando la muerte de centenares de personas. Contó con vientos máximos de 240 kilómetros por hora.
David. Este es uno de los huracanes más intensos que haya afectado nuestro territorio. Ocurrió el 31 de agosto de 1979, fue de categoría 4 y su ojo cruzó entre San Cristóbal y Baní. Produjo cientos de muertes, daños en la agropecuaria y dejó a miles de familias sin viviendas.

George. Llegó la mañana del 22 de septiembre de 1998. Fue de categoría 3 de acuerdo con la escala Saffir-Simpson (unos 200 kilómetros por hora), y provocó la muerte de más de 1000 personas.