Los Indios de Cleveland por mucho tiempo han demostrado que son un equipo que sabe sacarle lo mejor a sus jugadores jóvenes.
Y desde hace un par de años, el dirigente Terry Francona ha estado haciendo precisamente eso.
Quizás no tiene el mismo material que en Boston, donde ganó un par de coronas, pero sí tienen suficientes hombres para causar un impacto… aunque quizás no este mismo año.
La ficha más preciada de los Indios es su abridor Corey Kluber, ganador del premio Cy Young de la Liga Americana en el 2014.
Kluber tuvo una marca de 18-9 y 2.44 de efectividad, cib 269 abanicados para superar fuertes rivales por el premio.
El muchacho de 28 años de edad tiene mucho en la bola y es una verdadera joya.
Junto a él en la rotación aparecen Carlos Carrasco y Trevor Bauer.
Además, está el recién llegado Gavin Floyd, un derecho que perteneció a los Bravos de Atlanta la pasada temporada y el quinto puesto de la rotación debe ser del dominicano Danny Salazar.
Salazar ha sido inconsistente para los Indios, pero aun hay confianza de que pueda levantar cabeza.
La perspectiva. Los Indios perdieron por el retiro a Jason Giambi, su bateador designado, que aun se mantenía como un hombre sumamente productivo.
Pero más que nada, era un líder en el clubhouse que aun no se sabe cómo será sustituido.
Cleveland necesita que Nick Swisher, operado en ambas rodillas, vuelva a su nivel de siempre si la salud se lo permite.
Otros que necesitan mejorar considerablemente son Jason Kipnis y Michael Bourne, que vienen de temporadas por debajo a lo que han acostumbrado.
El caso Santana. Con el dominicano Carlos Santana, los Indios han dado muchas vueltas y para el 2015 seguirán con esa tendencia, ahora colocándolo en la primera base, después de un fallido intento de moverlo de la receptoría a la antesala.
Santana pegó 27 jonrones y remolcó 85 carreras a pesar de tratar de adaptarse a una nueva posición, pero aun así mantuvo un elevado porcentaje de embasarse de .365 aunque su promedio de bateo fue bajo (.231).
En la receptoría está el brasileño Yan Gomes (.278-21-74), un hombre que ha demostrado ser una pieza importante.
Pero en materia ofensiva, uno de los hombres más importantes es Michael Brantley, quien el año pasado demostró que está en camino de convertirse en una estrella de alto nivel, con un 2014 de .327, con 20 vuelacercas y 97 impulsadas.