Cinco provincias del nordeste, la región agrícola más productiva del país, encabezan la lista de las más vulnerables a  inundaciones durante épocas de alta frecuencia de lluvias. Estas son Juan Sánchez Ramírez, Duarte, Hermanas Mirabal, María Trinidad Sánchez y Samaná.

Además, ésta  es la región  donde está la cuenca del río Yuna, con 209 kilómetros, la segunda más grande del Cibao y afluente de 20 ríos.  Estos cursos de aguas se concentran en las zonas media y baja del Yuna y el Camú, las dos corrientes principales, creando los humedales  más extensos del país y  Las Antillas.

La alta pluviometría es una  de las razones por la que durante temporadas de lluvia se producen   frecuentes inundaciones en   la región, a lo que se agrega que algunas de esas provincias  están por debajo del nivel medio del mar.

También la deforestación, el deterioro de las cuencas hidrográficas y el consecuente arrastre de los sedimentos, aumentan las crecidas de los ríos y, por ende, las inundaciones.

Tales datos se encuentran en el Plan de Mitigación de Acueductos en la región Nordeste, elaborado por  la Unión Europea, la Dirección de Cooperación Multisectorial  y el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) a los fines que se reduzca la vulnerabilidad del suministro de agua potable. Para  la ejecución de este proyecto se requiere 148 millones de pesos para  invertirlos en 29 obras.

 “A menudo, vemos cómo los acueductos, después de una tormenta, un huracán, inundaciones o deslizamientos de tierra quedan debilitados o completamente fuera de servicios en detrimento de la calidad de vida de las personas beneficiarias. Es por eso la importancia de que los acueductos sean sólidos”, expresa el informe.

El plan, elaborado el pasado año,  evaluó 69 acueductos, de los cuales 29 son susceptibles a ser dañados por un fenómeno natural. De los 29 sistemas, 14 se encuentran en estado crítico, 12 medianamente críticos y tres de forma ligera.

  Samaná y Juan Sánchez Ramírez son las de problemas mayores, con 10 acueductos en estado crítico.

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Principales daños

Los problemas más comunes encontrados en la evaluación de los acueductos del Nordeste son: las obras de toma presentan alta sedimentación y filtraciones, las estaciones de bombeo y plantas de tratamiento no reciben el mantenimiento adecuado; las estructuras de captación están ubicadas en los cauces de los ríos y arroyos.

 Energía

Otro de los inconvenientes es la falta de energía eléctrica permanente, pues no hay alternativa para operar los equipos de bombeo, algunas plantas no pueden potabilizar el  agua y una gran cantidad de depósitos se encuentran fuera de servicio.

Obras de toma

El plan identificó como las principales causas de vulnerabilidad en los sistemas de agua  las obras de toma, tanto para el líquido que está de manera superficial  como son diques, filtros o cajuelas o subterránea a través de pozos.