“Convierte tu muro en un peldaño.”
Rainer Maria Rilke.

Con mucha frecuencia, la gente me pregunta cómo logré mirar la vida del modo que lo hago. Siempre respondo que dándole un lugar de amor a mí historia, re-significándola en lugar de solo recordarla. Cuando rememoramos nuestros eventos pasados, los reactualizamos y los convocamos para que se repitan.

Tal vez te preguntarás, ¿Cómo puedo dar un significado a un acontecimiento difícil, injusto o doloroso? En mi caso, he invertido los últimos veinticinco años de vida en transitar caminos de sanación, que me permitan estar más completa, más entera.

El agradecimiento me llevó a organizar los diversos recursos que he encontrado en un programa, que recoge lo que me ha funcionado de todas las fuentes que conozco: constelaciones familiares, chamanismo, arquetipos, misticismo, metagenealogía, rituales sistémicos y psicoterapia. Lo he llamado Love Vision.

Las personas que han participado en mis trabajos dicen que siempre son distintos. Para mí, son proyectos vivos que crecen a medida que los concurrentes y quienes facilitamos vamos aportando nuestras tomas de consciencia, experiencias y nuevas comprensiones.

El dramaturgo y director de cine francés Sacha Guitrydijo: “Lo poco que sé es fruto de mi ignorancia”. Los conocimientos esenciales corresponden a la consciencia y tienen un alcance tal que desconocemos aún. Love Vision es una construcción de fundamentos para sostener relaciones sanas, plenas y significativas, que descansan sobre conocimientos intuitivos.

En sus libros, Carlos Castaneda nos acompaña en el camino de comprensión de aquello que nos impide llegar a este estado intuitivo, en donde el espíritu unifica lo que antes estuvo separado, y el amor que estaba estancado en los planos de la conciencia, fluye hacia todas nuestras relaciones.

El filósofo humanista francés del Renacimiento, creador del género literario conocido en la Edad Moderna como ensayo, Michel de Montaigne creía que la prueba más clara de sabiduría es una alegría continua. La pregunta esencial para saber si nos encontramos en relaciones sanas es: ¿me brinda alegría? La alegría solo viene de la reconciliación. Love Vision es un canal de intercesión con nuestro origen y nuestras historias. El dolor emocional, que tan frecuentemente experimentamos, es debido a que nuestros pensamientos no corresponden a la realidad que vivimos.

Toda la tensión que sentimos se origina en los conflictos internos que tenemos al no asentir lo que es. Cuando discutimos con la realidad perdemos.

A veces, la gente me dice Fulano no debería haber hecho o dicho tal cosa. Mi respuesta es: ¿de qué sirve oponerse? ¿acaso lograrás que se revierta lo que ya dijo o hizo?

Toda oposición es interior. Todo lo que ocurre afuera, es el reflejo de lo que pasa adentro. La realidad es un espejo de cómo me veo a mí misma. Cada relación es una valiosa oportunidad de autoconocimiento.

La travesía del alma incluye tres movimientos:

1-Reconocer nuestras heridas, cuidarlas y sanarlas:

Todos hemos sufrido malos tratos, descuidos, abusos, pérdidas, irrespetos, desprecio. Algunas heridas son biográficas (lo que yo hago), y otras son del sistema (secretos, muertes, exclusiones, etc). Muchas personas usan sus heridas para justificar sus desgracias, y como el cuerpo recuerda, en él se mostrará nuestro recorrido.

2- Reconocer nuestros dones:

Los dones son préstamos que la vida nos hace que a veces vienen envueltos en el ropaje de nuestros padres, abuelos, ancestros, etc. Son un legado ancestral y divino de talentos, recursos, y capacidades que nos facilitan el viaje.

3- Asumir los retos:

Es la llamada del viaje del héroe. Una enfermedad, una traición, una rotura del corazón que nos obliga a regresar a nosotros mismos en busca de recursos. Cada logro, cada cumbre de montaña que alcanzamos nos trae el descenso. Los retos son maneras de fortalecernos, así que irán en la misma proporción al tamaño de la tarea.

Love Vision es un retorno a la confianza, la entrega, la felicidad, la plenitud, la creatividad, la nutrición y la sanación que nos brinda el amor. Para mí, más que un entrenamiento es un estilo de vida, una manera de relacionarnos circularmente.

Esta semana entramos en la vuelta número nueve de este camino de transformación desde el amor, dirigido a aquellos que saben merecen una mejor calidad de vida, a los que están dispuestos a cambiar la realidad que experimentan, a quienes poseen el coraje para realmente conocerse y tienen la resolución de re-significar su historia, a las personas que desean sanar todas sus relaciones (con la familia, amigos, pareja, Dios y consigo mismas) y a quienes aspiran ser cada día mejores personas, para vivir de una forma más plena, que les permita servir a otros de un mejor modo.

Un curso de milagros dice que nos hemos detenido momentáneamente para encontrarnos unos a otros, para conocernos, amarnos y compartir. Este precioso y transitorio momento es un pequeño paréntesis en la eternidad. Si compartimos con cariño, alegría y amor, crearemos abundancia y alegría en todos. Entonces, este momento habrá valido el esfuerzo…