El escritor Roberto Marcallé Abreu, quien ha sido galardonado este año como Premio Nacional de Literatura, puso a circular su novela “Bruma de gente inhóspita”, que ha sido calificada en los círculos literarios nacionales como “un libro inquietante”.

El catedrático y ensayista Alex Ferreras afirma, en un estudio que acompaña el texto, que el autor “se concentra en brindarnos un cuadro literario de la mentalidad de la clase política dominicana y de cómo, por el distanciamiento de esta de los más mínimos principios éticos y morales que deberían encauzarla, degenera en los más bajos niveles de deshumanización que hemos conocido en nuestra historia”.

Añade que esa clase ha colocado sus intereses particulares por encima del colectivo sin que importe el precio a pagar en términos de destrucción de los principios, de trivializar el peso del sacrificio y el legado de nuestros héroes, mártires y próceres.

La novela se divide en cuatro partes, cada una de las cuales termina por confluir en un drama tan intenso que es como una advertencia. Desde el primer párrafo el narrador omnisciente despierta la preocupación del lector cuando manifiesta que “está en conocimiento de un oscuro secreto que ya le ha costado la vida a muchas personas”.

Subraya que alcanzar ese enigma “no fue producto de una conversación equívoca o de una confidencia desesperada. No se derivó de la lectura inscrita en un papel extraviado en un libro voluminoso y polvoriento que cayó en mis manos gracias a una de esas raras casualidades de la existencia. No recibí ninguna carta ni tuve el privilegio de escuchar un extenso y pormenorizado diálogo tan inconveniente como inverosímil”.

En la contraportada del volumen, que supera las 400 páginas, Marcallé Abreu revela que luego de concluir su discurso de aceptación del Premio Nacional de Literatura una persona que calificó como honorable se le acercó para preguntarle las razones por las cuales había calificado la realidad nacional presente y futura como “inquietante”.

El autor respondió que la novela “Bruma de gente inhóspita” era “la mejor de las respuestas que podía ofrecerle”. Ferreras apunta que “el tono que predomina en la mayoría de las escenas es el de una gran tragedia” y expresa que “un dejo apocalíptico atraviesa sus páginas”.

“El espíritu del mal”, dice, “se ha infiltrado en los que han detentado el poder, en las personas que los rodean y en el común de la gente y las instituciones. Han perdido el sentido de la realidad. El Mal se ha ganado sus corazones. De ahí la degradación de sus rasgos humanos que nos asombra, nos aterra, nos desconcierta en todo este texto que, por el tratamiento de esta tragedia, será un referente obligatorio ante los difíciles tiempos que ya vivimos y los que aún nos aguardan”.

El autor. Marcallé Abreu ha recibido en tres ocasiones el Premio Nacional de Novela del Ministerio de Cultura y es Premio Nacional de Novela en el concurso literario nacional de la Universidad Central del Este (UCE). Autor de más de veinte obras literarias, anunció varias que serán publicadas en el curso de este año.