Hoy 
POR YOANY CRUZ
Luego de disfrutar del gran concierto de Navidad La música se pinta de solidaridad y esperanza, el presidente Leonel Fernández Reyna y la primera dama Margarita Cedeño de Fernández, ofrecieron un coctel a sus invitados en los jardines del Teatro Nacional. El concierto, que reunió un elenco de grandes estrellas de la música y el arte dominicano en la Sala Eduardo Brito del Teatro Nacional, tiene el objetivo de recaudar fondos para continuar los proyectos sociales que se realizan desde el Despacho de la Primera Dama, con los que apoya la educación, salud y promoción humana.
La música se pinta de solidaridad y esperanza fue dedicado a la familia dominicana, como un testimonio del esfuerzo y la labor que se realiza desde el Despacho de la Primera Dama.
La ocasión fue aprovechada también por el presidente Leonel Fernández Reyna, para desearles a todos una feliz Navidad y un venturoso año 2006.
Para el brindis se habilitó un espacio con un gigantesco mural alegórico a la pintura de Cándido Bidó, acompañado de una decoración hecha en piezas típicas dominicanas, como charamicos adornados con luces blancas y azules, colocados en tarros de barro pintados con obras de Cándido Bidó, que resaltaron la dominicanidad.
La decoración fue complementada con elegantes arreglos elaborados con margaritas en diferentes colores, girasoles y gerberas, colocados en las estaciones habilitadas para la comodidad de los presentes.
Durante el departir, las personalidades que asistieron motivados por la solidaridad y el amor al prójimo, intercambiaron impresiones acerca del evento y aprovecharon la actividad para felicitar a la Primera Dama por su labor y las iniciativas que emprendió en este año que finaliza.
El agasajo finalizó con un espectacular show de fuegos artificiales que iluminaron el cielo con luces multicolores que fueron el deleite de los presentes.
Incidente con la prensa
El Nacional, en su edición de ayer, se hizo eco de que los periodistas que cubrían el espectáculo en la sala Eduardo Brito, fueron expulsados de la misma por la seguridad presidencial, lo que impidió que reporteros hicieran su trabajo.
