Por primera vez el país implementa una coerción consistente en la colocación de un grillete electrónico. La medida se estrena con el abogado Renzo Hilario, acusado de falsificar una orden judicial que varía la prisión preventiva por garantía económica a Nelson Cabral, imputado por el fraude al Banco Peravia.
La medida cautelar de tres meses fue combinada con el arresto domiciliario, además de impedimento de salida y una garantía económica de 500 mil pesos.
Hilario tiene 10 días para acordar con la compañía que gestiona los brazaletes, ya que es el imputado el que corre con el costo del mismo. En caso de que no lo haga, entonces deberá cumplir prisión preventiva, como había pedido en principio el Ministerio Público, en la cárcel de la Victoria.
Aunque el localizador electrónico está establecido como una de las medidas de coerción en el Código Procesal Dominicano, fue hasta marzo de este año que se dispuso su utilización.
Hilario fue apresado por falsificación y uso de documentos falsos, pero el juez José Alejandro Vargas argumentó que según lo que veía no era para conseguir la libertad del mismo, porque este no intentó sacar al imputado, sino estafarlo, ya que le habría entregado 325 mil para pagar la supuesta fianza.