La directora del Instituto Nacional para la Protección del Consumidor (Pro Consumidor) Anina del Castillo, aseguró que ha surtido efecto positivo la disposición adoptada por el Ministerio de Industria y Comercio, de cancelar el permiso de importación a las empresas que ingresen al país leche para ser vendida a granel.
Explicó que en los operativos regulares que desarrollan en busca de terminar la práctica, han hallado que se ha registrado una notable merma de la venta del producto. Dijo que algunos ahora la envasan en fundas.
Dijo que el procedimiento que siguen es notificar a Industria y Comercio y esta institución se encarga del proceso de cancelación de los permisos.
Explicó que esa medida se adoptó en la gestión pasada y entiende que no tiene porqué variar, debido a que se trata de un tema vinculado a la salud de los ciudadanos.
“Nosotros entendemos que la disposición de la venta de leche a granel tiene que ser respetada y por eso hemos sido implacables con aquellos que continúan la práctica de vender leche en esas condiciones”, expresó.
Recordó que la leche es un alimento altamente consumido por los niños y no hay posibilidad de que una ama de casa discrimine si le están vendiendo leche real o si le venden una formula láctea destinada para la industria porque, a la vista, parece lo mismo.
Añadió que a esa situación se agregan todos los contaminantes que pueden llegar a ese producto por la manipulación a granel.
Alta cantidad productos vencidos. En otro orden, Del Castillo dijo que es voluminosa la cantidad de productos vencidos que decomisan, y que uno de los mayores hallazgos que tuvieron recientemente los inspectores, fue de fórmulas lácteas para bebés.
Explicó que persiste el mal hábito de no revisar las etiquetas de los productos al comprarlos y que eso se refleja hasta en los mismos comerciantes.
Puso como ejemplo que recientemente decomisaron productos vencidos en un establecimiento que los había recibido el día antes.
Otro aspecto que señaló, es que hay productos que las personas piensan que no se vencen, pero en realidad todo tiene una fecha de caducidad.
“Los jabones de los niños es lo que más se encuentra vencido porque la gente no los revisa. Nosotros sancionamos siempre a los proveedores pero es una cuestión que tienen que aprender a verlo”, insistió.
Otros productos que dice que no hay conciencia de que caducan son las bebidas alcohólicas como las cervezas y el ron, los refrescos y los detergentes de uso cotidiano.
A pesar de que han realizado campañas, entiende que se debe seguir avanzando en el tema.