El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, conjuntamente con la Corporación Financiera Internacional (IFC) y la Unión Europea pondrán en marcha un programa para ayudar a las empresas pequeñas y medianas a reducir sus niveles de contaminación con la finalidad de mejorar la sostenibilidad ambiental y la competitividad de ese segmento comercial en la República Dominicana.
Mediante comunicado de prensa, la institución informó que el apoyo consiste en la identificación, a través de la estrategia de Producción más Limpia, de oportunidades para reducir la producción de desechos y la contaminación, y promover el uso más eficiente de la energía, materias primas y del agua.
Indica que las 500,000 Pymes del país son fuerzas motrices importantes de la economía; generan empleo y bienes esenciales. Si bien el impacto individual de estas empresas es escaso en comparación con las compañías grandes, el impacto ambiental acumulado del sector pymes es importante. Agrega que los programas de producción más limpia que se han puesto en práctica en empresas de todo el mundo, con el apoyo de IFC, han demostrado que las compañías pueden mejorar la eficiencia productiva y la rentabilidad mediante la reducción de emisiones nocivas, que aceleran el cambio climático, entre otros impactos negativos.
«Desde 2011 hemos trabajado en estrecha colaboración con una amplia variedad de asociaciones empresariales a fin de aumentar la competitividad de los empresarios dominicanos a través de la producción más limpia”, explica Zoila Gutiérrez, vice ministra de Gestión Ambiental del Ministerio de Medio Ambiente .
Afirma que gracias a esta colaboración con IFC y la Unión Europea daremos otro paso importante hacia métodos más sostenibles que protejan el medio ambiente y ayuden a las empresas a ser más productivas.
Más del 97% de la electricidad en el Caribe se genera a partir de combustibles fósiles.
El monto de las facturas de electricidad puede llegar a ser dos o tres veces más elevado que en otras partes de América Latina. El uso eficiente y menos contaminante de la energía, así como el consumo eficiente del agua y otros recursos, son cruciales para ayudar a las economías insulares a crecer de manera sostenible.