La ex estrella de las Grandes Ligas, José Mesa, agradeció a Dios y su familia, por el éxito que obtuvo durante su participación como jugador de béisbol, donde consigió éxitos, que lo llevaron ayer al Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano.
“Estoy muy agradecido de Dios y mi familia pues por largos años estuve en los estadios jugando”, apuntó el Monstruo de Azua. Mesa, en el ceremonial tuvo como edecán a su hijo José Ramón Mesa, quien es un destacados lanzador de las ligas menores. Estuvo acompañado de su familia.